Autoridades de la Ciudad de México y de la Fiscalía General de Justicia capitalina violaron los protocolos para decidir la entrega de los hijos de Giovana 'N' y Mario Alberto 'N' , presuntos feminicidas de Fátima, ya que no realizaron un diagnóstico previo, social, psicológico y económico de los menores de 3, 5 y 7 años.
La abuela materna, Marcelina Cruz Hernández, informó que el próximo lunes iniciarán el litigio ante el DIF. El argumento central es que la familia paterna "actuó mal" pues solapó a su hijo Mario.
La semana pasada, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, informó que "la Subprocuraduría de Atención a Víctimas del Delito y Servicios a la Comunidad, la Secretaría de las Mujeres y el DIF estaban atendiendo esta situación. Hasta donde conozco, no hubo ninguna violación en el proceso o en la entrega de los niños".
La asesora jurídica de la abuela, Angélica Urbina, sostiene lo contrario y pide que en todo caso, las autoridades demuestren cuál fue el criterio para la entrega de los tres menores a los abuelos paternos.
En otro punto, la abogada reiteró que ya dejó el caso por amenazas, incluso de muerte, y que ahora solo fungirá como asesora jurídica de la abuela y ya no estará en la defensa ante tribunales.
Aunque afirmó que la línea de defensa de Giovanna es que era víctima de violencia familiar, denunciada, incluso tres veces ante el Ministerio Público y que nunca le hicieron caso.
MILENIO estuvo en el domicilio de la abuela materna y donde vivía la menor asesinada. En ambos sitios, existen diversos testimonios de la violencia familiar de la que era víctima Giovanna por parte de su pareja.
"Tres veces, Mario Alberto intentó prenderle fuego, incluso el Ministerio Público de la zona tuvo conocimiento de esa violencia, pero nunca le hicieron caso le preguntaban que dónde estaban los golpes, pero no hicieron nada", dijo su madre.
bgpa