José Héctor Cortés Hernández, ambientalista e integrante de la organización Revivir al Río San Francisco y Vitalius Mx, aseguró que la contaminación que existe en los ríos es más peligrosa que el covid-19, pues pone en riesgo la salud de miles de poblanos a largo plazo, pero que en este confinamiento ha acelerado su limpieza.
En un recorrido realizado por MILENIO PUEBLA, se verificó que el Río San Francisco que es parte de la cuenca del Atoyac, ubicado en circuito Juan Pablo II, está más limpio e incluso se dejan ver garzas blancas, colibríes, zanates, azulones, papamoscas grises sedosos y cuitlacoches.
Asimismo, se observó que en este tramo existen especies como bambús y pirul, sin embargo el espacio que está adoquinado para conducir a una zona habitacional se encuentra descuidado, sin mantenimiento, por lo que la hierba sirve de refugio para que las personas consuman drogas.
En la misma cuenca, a la altura de la Avenida Nacional y 57 Poniente, se detectó que el agua está sin ningún químico, en donde se pudo apreciar una bóveda y las rocas originales del río, de lo que anteriores generaciones disfrutaron.
En entrevista, José Héctor Cortés, señaló que en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, gracias a la pandemia se ha avanzado en el tema de salvar la cuenca, toda vez que la disminución de la actividad de las fábricas clandestinas que descargan contaminantes, así como de las vivienda, ocasionó que se viera más limpio y se le brindó un respiro.
“Los poblanos ignoran que es más peligrosa la contaminación del río, pues durante años se convivió con él, pero permitimos las descargas y la basura que mata a miles de personas, ya que tan solo el respirar esos contaminantes la gente se enferma de cáncer sin saberlo”, recalcó el activista.
El también investigador destacó que se debe aprovechar la nueva normalidad, porque eso ayudará a que la contaminación no vuelva a los altos niveles que se encontraba antes de la pandemia, debido a que si el sector industrial descarga sus aguas al 100 por ciento, habrá un retroceso en lo que se ha ganado.
Asimismo, indicó que las autoridades están haciendo su parte, como es el caso de Conagua, la cual está en proceso de la firma de un convenio de colaboración interinstitucional, a través del director jurídico, René González Huerta, para sanear el Río Atoyac.
“Si podemos vincular la lucha por la regeneración del Afluente con la emergencia sanitaria enfocado en las vías respiratorias, ahí sí puede ver un cambio radical, ya que al oler lo que se desecha en un radio de 3 a 5 kilómetros, te genera hasta cáncer; el covid-19 es un enemigo silencioso, pero te hace daño en pocos días, sin embargo esta contaminación, es un mal a largo plazo”, enfatizó el activista.
Ante esto, dijo que el 2021 se darán los primeros pasos de regenerar el Atoyac, de continuar así, “me puedo aventurar que el coronavirus si puede adelantar mucho y en el próximo año se tendrán importantes cambios”.
Cortés Hernández abundó en que los ciudadanos deben entender que les corresponde “poner su granito de arena”.
LEE