Si bien las universidades han invertido en diversas estrategias de seguridad a las afueras de sus instituciones, la percepción de los estudiantes sigue siendo que falta aún mucho trabajo por hacer, ya que persiste un alto nivel de asaltos, los cuales se desarrollan a las primeras horas del día, antes de que los alumnos ingresen a sus respectivas facultades.
Tan sólo en 2023, Puebla cerró con 4 mil 380 robos a transeúntes en vía pública, colocándose en el lugar cuatro a nivel nacional con mayor incidencia, siendo el Estado de México el primer peldaño con 20 mil 171 casos, seguido de la Ciudad de México con 8 mil 940, y en tercera posición, Jalisco con 6 mil 801.
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De los 4 mil 380 robos que se realizaron en la vía pública durante el 2023, 3 mil 681 fueron con violencia, y 699 sin violencia; por otra parte, la cifra del año anterior con respecto a robos en negocios en el territorio poblano, fue de 4 mil 379 casos, de los cuales, 2 mil 576 se llevaron a cabo de forma violenta, y mil 803 fueron sin violencia.
Soluciones implementadas
En enero de 2024, el rector de la Upaep, Emilio Baños Ardavín, destacó una serie de programas y acciones que se empezaron a implementar desde el año pasado para aumentar los niveles de seguridad en el Barrio de Santiago.
Entre las iniciativas que resaltó se encuentra: “Camina Acompañado” la cual ejecutaron a finales de 2023 y que será un proyecto permanente, donde siempre habrá un acompañamiento por parte del personal asignado a la vigilancia en la periferia de la Universidad.
Cabe destacar, que a las afueras de la Upaep se pudieron observar diversas cámaras de seguridad, además de personal en cada calle, con chalecos que los identifican.
Al respecto, Rodrigo Reyes, estudiante del noveno semestre de odontología de esta institución, señaló que desde hace tres meses han bajado los niveles delictivos pero muy “poco”, por lo que consideró necesario que se refuerce la vigilancia, ya que aún son altos los niveles de asaltos que se realizan contra los estudiantes, principalmente en las mañanas.
“Yo no he sido víctima afortunadamente, pero hay compañeros que sí, han sido asaltados, principalmente en las mañanas, como vienen de lejos, llegan como 6:30, y pues en los alrededores los asaltan”, dijo.
Otras instituciones
Por su parte, Corina Nolasco de la facultad de Cultura Física de la BUAP, detalló que su horario es de las 13:00 a las 17:30 horas, y que desafortunadamente, a la hora que sale no percibe seguridad, puesto que no hay elementos que realicen rondines.
Abundó, que conoce compañeros que han sido víctimas de este tipo de delitos, por lo que expuso que no se siente segura cuando sale de la escuela, ya que, tiene que caminar unas calles para tomar su transporte público.
Mientras tanto, Vianey, trabajadora de un café internet ubicado al costado de la Facultad de Contaduría Pública de la máxima casa de estudios, relató que en los siete años que lleve laborando en la zona, si se han hecho presentes casos de robos a los negocios, y asaltos a los estudiantes.
Destacó que ante la cercanía del Mercado Zapata, suele transitar por la zona gente poco confiable, por lo que los dueños de negocios como tiendas, papelerías, comidas, han optado porque a las 20:00 horas todos cierren.
Del mismo modo, han invertido en materia de seguridad, a fin de resguardarse contra estas prácticas, ya que enfatizó en que no se ven seguido policías que resguarden la periferia de Ciudad Universitaria.
“Afortunadamente yo no he sido víctima, pero otros compañeros sí. Hay poco seguridad, por lo que cerramos a las 8 de la noche, tenemos cámaras de vigilancia, silbatos, además, nos apoyamos entre todos”, subrayó al agregar que otro de los problemas que se ha sumado a la zona, es el consumo de alcohol de los propios universitarios, quienes dejan basura en las calles, y al salir ya “en estado alcohólico incluso hacen sus necesidades en la calle”.
CHM