La pandemia dejó varios estragos entre la población, uno de los principales fue la salud mental de los jóvenes y adultos, y es que después del confinamiento y pasar por situaciones derivadas de la misma enfermedad, como la pérdida de seres queridos, generaron varios altibajos emocionales.
“La pandemia es una contingencia epidemiológica en la que se genera miedo, se genera mucho estrés, incertidumbre, problemas sociales, complicaciones por derivados de la propia enfermedad como puede ser el fallecimiento de algunos familiares, la pérdida de empleos, un aislamiento social o una pérdida del contacto entre padres, por ejemplo en niños y adolescentes”, compartió el médico, psiquiatra, José Fernando Ojeda Palomera.
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Las consecuencias de este padecimiento pueden ser graves desde el aislamiento social y provocar que las personas sean más reservadas, hasta episodios de exaltación y, en el peor de los casos, atentar contra la integridad de si mismo.
“Dificultades como problemas de aprendizaje, aislamiento social, deserción escolar, pérdida de empleos, problemas en la relación con sus padres (…) Las personas empiezan a mostrar conductas disfuncionales como pueden ser conductas autolesivas, consumo de sustancias y que esto deriven problema de adicción, o también puede ser también, en el peor de los casos, intentos de suicidio”, dijo.
En caso de presentar alguna de estas características, recomiendan acudir con algún especialista y solicitar ayuda profesional.
JMH