Fue aprobada una multa de hasta 10 mil pesos para quienes nieguen el uso de transporte público a personal de salud, operativo, administrativo o de limpieza que labore en hospitales, que se encuentren trabajando en primera línea ante casos de pandemia, epidemia o cualquier otra contingencia o situación grave.
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En la sesión de hoy, el Congreso del Estado aprobó la iniciativa que reforma la Ley de Transporte de Tamaulipas, con el objetivo de aumentar las sanciones para quienes nieguen el servicio a personas las condiciones antes señaladas.
La legislación vigente señala que “se sancionará con multa equivalente de sesenta a ochenta veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización, a los responsables, conductores, concesionarios o permisionarios y prestadores del servicio público de transporte y de los servicios auxiliares, respectivamente, en cualquier modalidad, que nieguen, impidan u obstaculicen el uso del servicio a las personas con discapacidad”.
La reforma añade: “Se aumentará hasta una mitad más de la multa, cuando las infracciones antes descritas se cometan en perjuicio de persona o personas que presten un servicio de salud, a partir de la emisión de medidas de seguridad por parte de la autoridad sanitaria ante casos de pandemia, epidemia o de cualquier otra situación, contingencia o riesgo grave de carácter sanitario que afecten la salud y la vida de las personas y hasta que se declare formalmente que han concluido sus efectos.
No se aplicará esta sanción en el supuesto de que las medidas de seguridad de la autoridad sanitaria antes señaladas, establezcan la suspensión o restricción del servicio de transporte público”.
Así, las sanciones van desde 7,819.20 pesos hasta 10,425.60 pesos, de acuerdo al valor de la UMA que es de 86.88 pesos.
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