La educación ambiental es una asignatura urgente que no voltean a ver los gobiernos, advirtió la activista Gladys Ruiz Olvera, quien dijo que el cambio climático está generando una sequía temprana y es un aviso más de sus efectos.
Señaló que la escasez de agua provocada por la falta de lluvias es un claro reflejo de la problemática que prevalece y nos obliga a todos a tomar acciones.
La ambientalista ha propuesto que en el plan de estudios de nivel básico, se incluya desde preescolar una materia relacionada con el cambio climático, a manera de concientizar a las nuevas generaciones.
“Por ejemplo, desde preescolar se tiene que crear en los niños esa conciencia del uso responsable del agua, porque de no hacerlo todos contribuiremos a que el futuro ambiental traiga graves impactos”.
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Expuso que el salvar al planeta es una tarea que nos ocupa a todos por igual, pero desde el sector gubernamental no parece haber suficiente interés en el tema.
“Es una tarea que se debe aterrizar de manera urgente, pero que desde los gobiernos no se ha dimensionado y no se ha volteado a ver como se debe; la sequía que ya padecemos no debemos subestimarla”.
Considera que los niños deben aprender como ahorrar más energía, cuidar el agua, crear huertas y mejorar la alimentación dentro de las aulas, entre muchos otros temas.
Está convencida que son ellos, los niños, quienes van a ayudar a hacer conciencia entre los adultos, con sus padres, familiares y vecinos, en acciones como cuidar el agua, separar los desechos, no quemar basura y el manejo del plástico, entre otras cosas más.
Ruiz Olvera ha organizado campamentos con niños de 4 a 10 años para sensibilizarlos de las cuestiones ambientales y convertirlos en aliados en la lucha contra la contaminación.
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Ahí los menores llegan a comprender la transformación de la naturaleza por la influencia del cambio climático y fenómenos como la lluvia, la nieve o la sequía.
El 26 de enero es el Día Mundial de la Educación Ambiental, instaurado con el fin de crear conciencia sobre la problemática global.
Los primeros indicios sobre la importancia de cuidar el medio ambiente surgen en 1972, cuando en la Declaración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente en Estocolmo, Suecia expresó su interés en crear conciencia e implementar principios útiles a la sociedad como una guía para preservar y mejorar el medio ambiente.
Y no fue hasta 1975 durante el Seminario Internacional de Educación Ambiental en el que participaron expertos de más de 70 naciones, que plasmaron sus objetivos básicos en la Carta de Belgrado. Definieron seis puntos capitales para ayudar a los grupos sociales y a las personas a involucrarse activamente en el logro de esos objetivos.
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AYPC