El arzobispo Víctor Sánchez Espinosa encabezó la entronización a la Basílica Catedral de Puebla de la reliquia de primer grado del Beato Moisés Lira Serafín, misma que consta de una parte de hueso delicado que pertenece al fémur derecho.
La reliquia permanecerá en la capilla de las reliquias que se ubica al interior de la Catedral.
- Te recomendamos ¿Quién fue Moisés Lira, sacerdote poblano que fue beatificado por el Papa Francisco? Estados
El líder de la Grey Católica abundó que la Iglesia está de fiesta por la entronización del Beato Moisés Lira Serafín, a la par de añadir que Dios siempre auxilia a quien confía en él.
"Sí el justo es hijo de Dios, éste lo liberará. Debemos ser amarantos de la paz, sobre todo en estos momentos que estamos viviendo casos de violencia e inseguridad", apuntó.
Fue el pasado 14 de septiembre, después de un largo proceso de investigación, el sacerdote poblano originario de Zacatlán, Moisés Lira Serafín fue beatificado en la Insigne Nacional Basílica de Guadalupe.
¿Quien fue Moisés Lira Serafín?
Moisés Lira Serafín nació en Zacatlán, Puebla, México el 16 de septiembre de 1893.
Fue ordenado sacerdote el 14 de mayo de 1922, y el día de Navidad de ese año emitió sus votos perpetuos. Un mes después, acuñó la frase que sería su itinerario de santidad: “Es necesario ser muy pequeño para ser un gran santo”.
Fue maestro del noviciado, atendía a los enfermos especialmente como confesor, durante la epidemia de viruela negra de 1923. En 1925 en la Ciudad de México continuó aumentando su pasión por el culto a la Eucaristía y al sacramento de la reconciliación, visitó y asistió también a los encarcelados.
Murió en la Ciudad de México el 25 de junio de 1950. Fue declarado Venerable por Su Santidad el Papa Francisco el 27 de marzo de 2013.
¿Cuál fue el milagro por el que fue elevado a los altares como Beato?
Sanación total y pronta de una bebe en el seno materno que presentaba hidropesía fetal inmune; la recomendación médica era interrumpir el embarazo, pues tarde o temprano la bebé comenzaría a asfixiarse. Sin embargo, ni Rosa María ni su esposo Héctor pensaron en un aborto.
Oraron y pidieron la intercesión del padre Moisés Lira durante 9 días.
El ginecólogo había citado a Rosa María para el mes siguiente, bajo la advertencia de que muy probablemente la bebé llegaría sin vida. Cuando el ginecólogo estaba revisando el ultrasonido, de repente gritó: “¿Qué hicieron?” insistió el ginecólogo, y corrió a abrir la toma de la pantalla, donde ahora sólo se veía como una especie de pelotita - ¿Qué hicieron? ¡Ya no hay nada! -Pues sí, doctor -respondió Héctor-, ya no se ve nada. ¿Cómo desapareció? - ¡No tiene nada! -era todo lo que acertaba a decir el ginecólogo. - ¿Pero nada de qué? -preguntó Héctor. Fue entonces que el ginecólogo sonrió y dijo: '¡Ya no tiene nada de la enfermedad!'
¿Qué es una reliquia?
La palabra reliquia, derivada del latín (reliquie=lo que queda), se utilizaba para hablar de los restos mortales de una persona, sea el cuerpo completo o una de sus partes.
Las reliquias pueden ser de un mártir, un confesor (los santos que defendieron su fe, pero no murieron en martirio), un Papa, un doctor (santos que se caracterizaron por sus enseñanzas), un obispo, un fundador de una comunidad religiosa, etc.
CHM