La proyección para el 2030 es que en Monterrey se tengan hasta 29 días más con temperaturas por encima de los 40 grados, por lo que desde ahora el análisis de las islas de calor urbano se vuelve tema prioritario, alertó Gorka Zunicaray, coordinador de Desarrollo Urbano del World Resources Institute (WRI).
El experto refirió que si no se toman las medidas necesarias, los escenarios a mediano plazo llegarán a ser preocupantes, debido al exceso de mortalidad que se podría tener asociada a los golpes de calor.
Y es que las islas de calor son un fenómeno en el que algunas zonas de la metrópoli reportan temperaturas más altas de las que se tienen en la periferia.
“Ahora mismo estamos en una lucha a nivel global por contener la temperatura. El crecimiento fue de un grado y medio, y el escenario menos deseable serían dos grados y si no contenemos esa temperatura promedio global, el problema será que todos estos eventos climáticos van a crecer exponencialmente, y podríamos llegar a tener estas sequías prolongadas. También estos incrementos tan altos de temperatura impactan a la población mayor y a niños, y esto puede llevar a un exceso de mortalidad, es decir, a muertes asociadas a golpes de calor”, comentó.
En entrevista para la plataforma MILENIO-Multimedios, el coordinador de Desarrollo Urbano del WRI destacó que Monterrey se encuentra en una zona climática que registra temperaturas ya de por sí altas, además de que se tuvo un crecimiento expansivo en población en los últimos años, por lo que se eliminaron áreas verdes y se llenó de concreto la ciudad.
Por lo que Gorka Zunicaray asegura que todos esos factores juntos hacen que el fenómeno de islas de calor sea más frecuente y sean más graves las diferencias de temperaturas en diferentes puntos.
“En esta nueva condición que nos vemos inmersos, las proyecciones a un futuro cercano, por ejemplo al 2030, se registran escenarios en los que podríamos tener hasta un mes adicional en el que se presenten temperaturas por encima de los 40 grados centígrados, entonces eso va a complicar aún más este fenómeno de las islas de calor.
“Además, Monterrey ha tenido un crecimiento muy expansivo, eliminando zonas que antes eran de mayor valor ecológico, zonas agrícolas, que de alguna forma servían para amortiguar esta absorción de radiación solar”, precisó.
Otra variable importante, explicó, es que al interior de la zona construida del área metropolitana de Monterrey hay muy pocos árboles, y espacios abiertos que ayuden en detener el fenómeno.
Dentro de las acciones que tienen para realizar, recalcó, se puede empezar por actuar en el espacio público que ya existe, y que todas las vialidades tengan un arbolado abundante. Otra oportunidad es cambiar el tipo de materiales para incrementar las zonas permeables, y poner orden al crecimiento vertical.
“En Monterrey hay mucho crecimiento vertical, pero tenemos un gran contraste con grandes zonas de la ciudad que tienen una baja densidad, entonces en situaciones en que sería factible regenerar o plantear un cambio de uso de suelo no hace falta crear esas grandes torres de oficinas”, precisó.
El problema es grave, mencionó, por lo que es un tema en el que no solamente las autoridades tienen que tomar cartas en el asunto, sino que requiere de un cambio individual en la conducta, para que desde la propia ciudadanía se demande este tipo de soluciones de una ciudad más verde, con sombras.
Compartió que el World Resources Institute trabaja con el municipio de Monterrey para analizar el tema de islas de calor.
“Estamos apoyando con este tipo de análisis para determinar en zonas piloto, cuáles son los puntos más críticos, y empezar a analizar estos distintos puntos para proponer pilotos de reforestación.
“Y también ciertas soluciones y cierto diálogo con los actores privados, tenemos estas grandes superficies comerciales, estas grandes planchas de estacionamiento que incrementan aún más el efecto de las altas temperaturas”, señaló.
Por último, Gorka Zunicaray reflexionó sobre el hecho de que es tiempo de poner una pausa al modelo de asociación de crecimiento económico-crecimiento expansivo.
“Venimos de unos años con una idea de asociación del crecimiento económico con un crecimiento expansivo de la ciudad, creo que ya es momento de poner en pausa esta asociación y empezar a reflexionar críticamente sobre este modelo.
“Actualmente somos conscientes del problema, eso es un buen paso hacia el futuro, y creo que las autoridades son conscientes y tienen la intención de empezar a desarrollar este tipo de pilotos, creo vamos por el buen camino.
“Y a futuro falta también que la ciudadanía empiece a demandar más un modelo de ciudad alternativo que a la larga es beneficioso para todos”, remató.
- Te recomendamos Monterrey será sede del análisis comercial y de seguridad bilateral Política