Frank Carlos Camacho es uno de los ocho hijos de Carlos Camacho Espíritu y Louise Wardle, actualmente dirige el zoológico Africam Safari y en los últimos días se convirtió en el héroe poblano, por el rescate de la jirafa Benito, por lo que fue reconocido a nivel nacional.
Este hombre tiene 54 años y la mayor parte de su vida se ha dedicado a cuidar de las distintas especies del zoológico, así como en otros lugares del mundo, con el objetivo de concientizar a la población sobre el maltrato animal.
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Desde que era un niño estuvo cerca de la flora y la fauna, ya que sus padres le inculcaron el amor por la vida silvestre y la naturaleza, ya que era parte de su vida cotidiana; además uno de los valores más importantes que siempre menciona, es la conservación y el respeto por las especies.
Frank Carlos estudió Zootecnia en Estados Unidos, lo que le permitió explorar aún más su pasión por la vida silvestre desde una perspectiva global; en la universidad, adquirió conocimientos de las últimas tendencias y técnicas en el cuidado de animales.
Asimismo, continúa con el legado familiar, ya que en 1972, su padre fundó el zoológico Africam Safari, en donde asumió el cargo de director, ahí su especialidad es la vida silvestre, y este sitio, se convirtieron no solo en su lugar de trabajo, sino en una extensión de su compromiso con la protección de la fauna.
El amante de los animales, es vicepresidente de la Asociación Latinoamericana de Parques Zoológicos y Acuarios (ALPZA), en el que comparten una visión de la conservación a nivel latinoamericano, por lo que ha propuesto iniciativas para garantizar la preservación de diversas especies en la región e incluso es considerado como el defensor de la vida silvestre a nivel continental.
De igual forma, fue presidente de la Fundación Internacional del Elefante, en donde participó con estudios e investigaciones en los que abordó desafíos a gran escala en la conservación.
Dentro de sus logros, está la unión y liderazgo que creó junto con su hermana, Amy Camacho, quienes fueron denominados como un equipo imparable en la defensa de los animales y la preservación de sus hábitats. Otro de ellos es la expansión del zoológico y recibir a más especies que estaban en peligro. Y por último, salvar al cuadrúpedo "Benito", quien vivía en pésimas condiciones en el Parque Central de Ciudad Juárez y fue rescatado por este hombre, que planificó un viaje de más de 30 horas para que llegara al parque de conservación de vida silvestre más importante de América Latina que ahora es su nuevo hogar.
CHM