La crisis económica por la pandemia aún no termina. Don Ambrosio Torres Hernández, de 57 años, se quedó sin empleo y cambió la construcción por el intercambio de plantas de ornato por despensa.
"Se me acabó la chamba, yo trabajo en la construcción, pero como todas las obras cerraron y yo tenía plantas, pues dije, hay que sacarlas antes de que crezcan más grandes porque cuestan menos para transportarlas, por eso las estoy sacando".
Es originario de Veracruz, en donde cultiva pinos y luego viaja por carretera más de 1,200 kilómetros para ofrecerlos a cambio de productos de la canasta básica para él, su esposa e hijos.
Con un par de lonas se ubica en el semáforo de la avenida Eloy Cavazos en dirección al oriente, frente al Instituto Tecnológico de Nuevo León, en Guadalupe, en donde también oferta Nochebuena, palma areca y otras plantas de temporada.
"Por ejemplo, arroz, frijol, aceite, lo básico, es lo que comemos allá, porque la carne se me descompone, el maíz me aguanta más, lentejas, jabón, sí me llega de todo un poco", dijo.
Don Ambrosio contó que la necesidad y las ganas de salir adelante lo obligaron a buscar otras actividades económicas para llevar el sustento a casa.
"Yo solo estoy cambiando, solamente le vendo a la persona que no trae despensa, pero la mayoría las cambio. Estoy dando los pinos grandes a 200, tengo pinos de 70, tengo palmas a 150, tengo la Nochebuena a 60 pesos".
El padre de familia estará hasta el domingo en un horario de 11 de la mañana hasta el anochecer, y además les dará recomendaciones a los clientes para que sus plantas vivan todo el año.