Banquetas con obstrucciones, hundimientos y algunas guías podotáctiles rotas o sin continuación, son parte de los problemas a los que se enfrentan diariamente personas con discapacidad visual en Puebla.
El señor Jacobo, con un padecimiento visual con el que nació y que se agravó con el paso de los años, recorre vialidades en el Nororiente del Centro Histórico para pedir limosna, por lo que considera importante que la gente tenga empatía cuando quiere atravesar las calles, pero también que, el comercio ambulante no se adueñe de pasos peatonales y banquetas.
En un recorrido realizado por Telediario y MILENIO Puebla, se corroboró que, aunque hay calles en el primer cuadro de la ciudad con guías podotáctiles en buen estado, hay algunas con tramos dañados. Además, se pueden observar placas escritas en braille, que quedaron ocultos en medio de infraestructura telefónica.
En algunos casos, las guías podotáctiles se levantaron al no estar bien sujetas con cemento, lo que ha dejado tramos incompletos, en otras situaciones y calles al Suroriente del centro de la capital poblana, la infraestructura para personas con discapacidad visual únicamente fue instalada en las esquinas.
Para el señor Jacobo, las vialidades como la 5 de Mayo, la 9 y 11 Sur, así como algunas en el Norponiente y Nororiente, sobre todo de la 8 a la 18, son de las más difíciles para transitar, por la presencia de comerciantes informales, así como porque algunas guías se encuentran fracturadas, por lo que sugirió a las autoridades mayor atención en estos temas.
"Pues generalmente la gente si nos ayuda, con una moneda o para cruzar la calle, pero si es difícil en algunas zonas, complicado porque a veces nos seguimos derecho al no sentir la guía y topamos con otras personas, o simplemente porque hay letreros u objetos sobre las banquetas", concluyó Jacobo, hombre con discapacidad visual.
CHM