El bajo presupuesto que se contempla para 2020 complica la posibilidad de que se actualicen los atlas de riesgo, para los cuales se requiere una inversión considerable que no se ha podido hacer, señaló el coordinador estatal de Protección Civil, Pedro Granados Ramírez.
El funcionario estatal dijo que ha exhortado a los alcaldes a hacer lo propio y tener infraestructura suficiente para dar respuesta a la población en caso de un huracán, sin embargo, comprende que están limitados en materia económica.
Expresó que tampoco el plan de riesgo estatal ha sido renovado luego de que elaboró en el año 2009, mientras el de Tampico se hizo entre 2012 y 2013.
“Es necesario que se actualice lo más frecuentemente posible, hay información general que no cambia, algunos tipos de riesgos, pero otros sí, aunque son casos más particulares”.
A 64 años de que el huracán Hilda devastó el norte de Veracruz y sur de Tamaulipas, el funcionario estatal expuso que definitivamente todos los ámbitos de gobierno deben tener su plan de riesgo para actuar de manera eficaz en casos de emergencia.
“Es muy laborioso y costoso pero tiene que hacerse, el panorama del presupuesto complica esta posibilidad para estados y municipios, no se tiene el recurso para invertir en ello en este año y el próximo”.
Mencionó que a nivel estatal se requiere no menos de 20 millones de pesos, mientras que en los municipios, entre 1.5 y 2 millones aproximadamente.
“Es importante el atlas de riesgo pero también otro tipo de recursos, una camioneta, una ambulancia, por ejemplo, se debe contar con todo esto en la medida de las posibilidades”, refirió el titular de Protección Civil en la entidad tamaulipeca.
Granados Ramírez destacó que ha exhortado a los gobiernos municipales para que con base en sus capacidades financieras se haga todo lo posible por actualizar sus atlas de riesgo cada año y no se queden desfasados.
Admitió que estatalmente se tiene que hacer lo propio y de esta manera concentrar toda la información necesaria para saber cómo actuar en caso de una situación que ponga en riesgo a la ciudadanía.
Madero y Altamira, pendientes
Los municipios de Ciudad Madero y Altamira, carecen de un atlas de riesgo actualizado, por lo que por sus propios medios han tenido que aplicar medidas de contención y prevención de afectaciones por las lluvias que se presentan año con año, sobre todo porque son las ciudades del sur que más sufren cuando se presentan los torrenciales aguaceros.
Desde el 2010 no se ha hecho la actualización de los diferentes atlas de riesgo en la zona, sin embargo, Ciudad Madero ha trabajado en la realización y compactación de diferentes áreas informativas para atender las situaciones de riesgo que se pudieran presentar en la zona.
El programa de Atlas de Riesgo estará dentro de una licitación, por lo que se está realizando la gestión ante las instancias correspondientes para poder saber qué empresa pudiera realizar este programa, aseguró Romel Martínez Flores, titular de Protección Civil de Madero.
Afirmó que la ciudadanía aún no está preparada al 100 por ciento para afrontar y enfrentar un huracán de gran magnitud como el Hilda. “Hay mucha relajación por parte de los habitantes en cuanto a no informarse y no acercarse a las diferentes direcciones municipales para saber qué hacer ante cualquier situación de riesgo”, puntualizó.
Mientras tanto en Altamira será hasta el próximo año cuando sea actualizado el Atlas de Riesgo en el municipio, pues ya es necesario, aseguró el director de Protección Civil, César Vázquez Jáuregui al respecto.
Dijo que es en el ejercicio fiscal de 2020 cuando se tiene contemplado invertir recursos para actualizar el documento, y tener identificadas las zonas de riesgo, en caso de que se presente un fenómeno meteorológico.
“Estamos trabajando en eso, yo creo que al inicio de este ejercicio que viene se estará haciendo, ya se tiene contemplado, ya se tiene que elaborar, es una instrucción, de hecho ya se siguieron instrucciones para la actualización, es importante tener dicha actualización, y ya se está trabajando en ello”, expresó.
Señaló que en el municipio existen un promedio de 82 colonias vulnerables y un aproximado de 35 a 40 familias por sector, mismos que están en riesgo en caso de que se presente un fenómeno de alto impacto.
“Eso es algo que ya se tiene que elaborar, ya estamos en los trabajos de actualización, esperemos que para el otro año quede”, insistió el funcionario.