El empleo informal en el que se encuentran en promedio seis de cada 10 trabajadores se traduce en un riesgo para el crecimiento económico en estados como Puebla, expresó María Teresa Herrera Rendón, Directora de la Facultad de Economía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep).
Señaló que las sociedades de hoy necesitan de una economía que esté orientada al bien común, que su objetivo sea el bienestar de las personas de todos los sectores sociales, principalmente los más vulnerables.
Durante la mesa de análisis “Economía para el Bien Común” organizada por la Upaep, Herrera Rendón destacó que el trabajador debe ser revalorizado por las actividades que desempeña dentro del sector público o privado, ya que la función que realiza es un bien común.
“Dentro de un mecanismo de mercado, se tiene que repensar el mercado y solidarizarse con las personas que están siendo más afectadas por los escenarios negativos que el mismo mercado puede provocar por la actual situación que se vive con la presencia de la pandemia del covid-19”, destaco.
A un año del primer caso de covid-19 en la entidad, la especialista llamó a impulsar el empleo formal, es decir, el que se encuentra formalizado mediante la celebración de un contrato de trabajo entre el trabajador y el empleador, según el cual el empleado goza de la protección y los beneficios que la ley establece en materia laboral.
Por su parte, Paul Dembinsky, director del Observatorio de Finanzas en Ginebra, Suiza y académico de la Universidad de Fribourg, Suiza, llamó a poner en el centro de la discusión de la política de todos los países, el problema del trabajo informal, con todas sus debilidades, fragilidades, fragmentaciones y riesgos que representan.
Comentó que, en promedio, los empleos informales en México representan alrededor del 60 por ciento, lo que origina un problema conceptual, estadístico y humano que afecta a las familias ante las complicaciones que se presentan
“Aquí surge la pregunta de cómo se puede conjugar la solidaridad entre el sector formal con el sector informal, que es mayor al primero desde el punto de vista del trabajo y del concepto de solidaridad. Cuando se habla de la dignidad del trabajo, se debería de poner en el centro de la discusión de la política, el problema del trabajo informal con todas sus debilidades, fragilidades, fragmentaciones y riesgos que representan para un país y que desde el punto de vista del trabajo formal y de la solidaridad, necesita de una solución inmediata”, destacó.
AFM