Universitarias e investigadoras cuestionan aumento de violencia y brecha de género en Puebla

En el marco del Día Internacional de la Mujer, las especialistas coincidieron en la necesidad de que se garanticen espacios para el desarrollo igualitario.

Una mujer camina sola por la calle. (Andrés Lobato)
Jaime Zambrano
Puebla /

Investigadoras, académicas y universitarias denunciaron que en medio de la pandemia del covid-19, se registra un aumento de violencia en sus diferentes expresiones, desde la física y verbal, hasta la laboral y sexual; además, la brecha de género en los diferentes ámbitos se profundizó.

Durante foros virtuales que organizaron las instituciones de educación superior tanto públicas como privadas, en el marco del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, las especialistas coincidieron en la necesidad de que se garanticen espacios para el desarrollo igualitario, tanto de hombres como de mujeres.

Marianne Helena Marchand, investigadora de la Escuela de Ciencias Sociales de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), lamentó que la violencia de género siga una tendencia al alza, tanto física, como emociona y económica.

Resaltó la necesidad de implementar acciones y la aplicación de herramientas para que, en todos los espacios, tanto físicos como virtuales y familiares, la violencia contra las mujeres se erradique y no se repita.

“El Día Internacional de la Mujer es un momento para reflexionar sobre las distintas olas de movimientos feministas y los logros que se ha alcanzado, así como de los retos que todavía tenemos que enfrentar. En México se ha aumentado demasiado la violencia de género tanto física, como psicológica, social y económica, por lo que tenemos que combatir esta situación con todas las herramientas a nuestra disposición, y la educación, en todos los niveles, es una parte fundamental en esta lucha”, mencionó la académica e investigadora de la UDLAP, quien desde 2003 forma parte del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y quien actualmente cuenta con el nivel III.

Por separado, Gordana Jovanovic Dolecek, investigadora de la Coordinación de Electrónica del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), lamentó que en la ciencia y en diferentes ámbitos de la vida, se presenta la desigualdad, además, no se reconoce la labor de las mujeres.

“El principal reto es ser mujer. Veo que a los hombres no les gusta cuando una mujer tiene algo más que ellos, no lo aceptan. Las mujeres enfrentan falta de reconocimiento a sus logros, falta de apoyo y en muchas ocasiones cargas excesivas de trabajo. A veces las mujeres pueden lograr cosas más fácilmente si tienen un hombre que las protege, esposo, novio, pero si estás sola es muy difícil”, subraya.

Jovanovic Dolecek resaltó la importancia de fomentar las vocaciones científicas entre las niñas y las adolescentes, para lo cual, es fundamental comenzar con una estimulación científica temprana en familia y en sociedad.

“Esto es muy importante y yo puedo decir esto con mi experiencia: nosotros trabajamos con nuestra hija cuando era pequeña desarrollando sus habilidades para las matemáticas y ella también era buena y competía en matemáticas y ahora es reconocida investigadora y profesora en la Universidad UCLA, Estados Unidos. La historia se repite, ahora ella hace lo mismo con sus hijos, y mi nieto de seis años compite en matemáticas”, explicó.

En su momento, Claudia Alonso González, responsable del área de Género del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ (IDHIE) de la Universidad Iberoamericana Puebla, explicó que la violencia de género pone en riesgo la permanencia en el entorno educativo e impacta en el rendimiento académico de las mujeres.

“En instituciones de educación superior, al menos cinco de cada 100 alumnas han sido víctimas de violación. 8.5 por ciento bajo efectos de sustancias químicas. No queremos que las estudiantes pierdan su fuerza vital. Necesitamos espacios donde nunca dejen de florecer”, sentenció la académica.

En tanto, Rosario Arrambide González, directora del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ (IDHIE) de la Ibero Puebla, destacó que la violencia constituye un obstáculo para la igualdad, el desarrollo y el bienestar de las mujeres.

“Los feminicidios, la mayor expresión de violencia contra la mujer, son una fractura del Estado de derecho que favorece la impunidad, pues suceden de manera progresiva y sistemática bajo un contexto de permisividad y violencia patriarcal”, lamentó.

En la serie de actividades organizadas por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) que se realizan bajo el lema “Universitarias líderes por un futuro igualitario”, Lilia Cedillo Ramírez, directora del Centro de Detección Biomolecular de la máxima casa de estudios, destacó que son las mujeres quienes están enfrentando un aumento de sus labores en el marco de la pandemia del covid-19.

Tras destacar el mensaje de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), “Mujeres líderes: Por un futuro igualitario en el mundo de la COVID-19”, Cedillo Ramírez resaltó que, junto a todas las tareas que realizan las mujeres, en las familias se están encargando de la salud de todos sus familiares.

“Es el momento de reflexionar en el hecho de que la mujer a lo largo de estos años, se ha preocupado por temas tan importantes como la salud. Hemos observado que la primera en preocuparse por la salud de la familia es la mujer, ya sea la madre, la esposa o la hija. Son quienes principalmente están a cargo o del cuidado de toda la familia o del cuidado de la salud de ellos”, apuntó.

Agregó que es fundamental que las mujeres y los hombres reconozcan que son diferentes y que se requiere el trabajo conjunto para la construcción de una mejor sociedad y de mejores instituciones.

“Los hombres y las mujeres somos diferentes, pero juntos, hemos logrado muchísimas cosas y prueba de ello es que nuestra universidad es una de las mejores instituciones educativas del país. Es momento de motivar a las jóvenes, aprender de ellas”, destacó.

mpl

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