El amor de una madre no tiene límites y más aún cuando se trata de salir adelante y dar todo por sus hijos.
Rosa Elena Ortiz, vecina de la colonia Praderas de San Juan, en el municipio de Juárez, es ejemplo de ello, ya que además de ser ama de casa, desempeña otros dos trabajos, uno de ellos bastante peculiar.
- Te recomendamos Madres Buscadoras marchan y exigen localizar a sus hijos Comunidad
“Bueno, yo aparte de ser la de casa, me dedico a trabajos de costura y también soy albañil, y al mismo tiempo soy orgullosamente abuelita”, mencionó.
Doña Rosy aprendió el oficio de la albañilería desde hace 25 años y es muy popular en la colonia, donde ha realizado diversos trabajos de construcción.
“Hace 25 años en la necesidad de salir adelante aprendí a ser albañil; mi padre me enseñó, aunque él era jardinero, me enseñó este oficio que hoy desempeño orgullosamente”, expresó doña Rosy.
Por la mañana lleva a su nieto a la escuela, regresa y le prepara el lonche, y en esos lapsos, continúa con sus trabajos pendientes de costura o de albañilería.
“Si tengo trabajo de albañilería, primero tengo que dejar a mi nieto a la escuela, luego regreso y continúo trabajando; después hago una pausa para llevarle el lonche y luego sigo con mi labores diarias”, añadió.
Su esposo Eleazar Torres se siente muy orgulloso de ella.
“Ella es el pilar de la casa, siempre lo he dicho; estoy muy orgulloso de ella, me inspira, no nada más a mi, sino a toda la familia”, mencionó.
Doña Rosy y Eleazar llevan 27 años de casados, tienen dos hijos y un nieto, y el secreto para ellos ha sido el apoyo, comprensión y sobre todo el amor, y sin duda su hogar es la principal obra que esta familia ha construido.
nrm