En un municipio preocupado por recolectar perros para “comprobar” la eficacia de su sistema de control canino ante una Secretaría de Salud que pide un mínimo de sacrificios sin tener un estudio de impacto ambiental, ahí vive Lucy, una mujer de casi 60 años que se ha convertido en el ángel de la guarda de los perros abandonados en la colonia Santa Julia.
Tras 15 años de labor ayudando a los canes en situación de calle, su cuerpo le cobra algunas facturas ya, y sin contar con seguridad social ni atención médica constante, Lucía se recupera como puede de una parálisis facial que la dejó fuera de combate hace algunas semanas.
Ahora celebra que su salud va mejorando, aunque se tapa el rostro para que el frío no cale en la movilidad que ha logrado recuperar. Ahora puede volver a ayudar a algunos de los perros que acostumbran seguirla, no sabe cuántos dejaron de comer durante los días que convaleció, “sí como que hay varios que no han recibido comida. Yo les dejo, pero no sé si alcancen todos”.
Es muy probable que haya logrado ayudar a más de cien perros a pesar del menosprecio de sus vecinos, “les estoy dando discretamente para que no les quieran hacer algo a ellos, ya ve que la gente cómo los mata (…) a veces llego a alimentar a tres manadas o veinte perros de desperdicio de pollo, a veces los ayudo con croquetas, a veces cuando hay ventas les compro pollo rostizado, hay manaditas que ya no he visto”.
Lucía es ambulante. Hoy puso su puesto de cosas usadas afuera de la iglesia de Santa Julia, pero regularmente extiende uno de accesorios para mascota afuera del mercado de la Aquiles Serdán, “a lo mejor no me pongo diario porque a veces está baja la venta y tengo que buscar por otro lado, pero ahí en el mercado de la (colonia) Aquiles Serdán, en la calle Tula está un estacionamiento con una lámina y una lona doblada blanca”, ahí dice que nos espera para que con nuestra compra ella pueda seguir ayudando a más.
“A mí me satisface más que me digas: ‘Lucy, usted ha ayudado a los perros, vengo a comprarle un suetercito para que los siga ayudando’”.
En sus esfuerzos por generar más ingresos, recorre su colonia, la Plutarco y la Aquiles Serdán, conoce la situación de abandono en esta zona de la ciudad de Pachuca y por eso aprovechó para dejar un mensaje claro a los políticos en turno, así como a los futuros candidatos: “a los políticos les digo que no solo vean por el beneficio propio, sino por la humanidad, por los animales, por el medio ambiente, por la tala, porque es un tema principal porque de ahí vivimos (…) es algo que los políticos deberían ver porque los animales están sufriendo mucho”, señaló a quienes hoy en la Bella Airosa no han logrado ejecutar el millón de pesos etiquetados desde 2019 para campañas masivas de esterilización canina.
“Ahorita que ya murió mi perro me quedó esa herencia de llevarles de comer a los perritos del canal o los que llegan al mercado o a veces andan por aquí”.