La explanada de la delegación del Instituto Nacional de Migración (INM) en Reynosa comienza a llenarse nuevamente de migrantes, en esta ocasión, son grupos de cubanos y algunos pocos nicaragüenses recién expulsados de Estados Unidos por intentar cruzar ilegalmente a través del río Bravo, sumando cerca de 60 personas en el área federal.
Uno de los grupos de deportados más recientes llegó este miércoles a las 9:00 de la mañana. El martes por la noche intentaron cruzar por la frontera de Reynosa y fueron detenidos por la Patrulla Fronteriza, llevados a las oficinas de detención en Texas y retornados en camiones por el puente Hidalgo.
Los deportados manifestaron que desconocían que al cruzar por el río quedarían sin oportunidad de pedir asilo humanitario en un futuro. Ahora permanecen sin dinero ni pertenencias, esperando la ayuda de familiares para hospedarse en hoteles en Reynosa, mientras que otros dormirán en la explanada debido a que los albergues están saturados.
Cabe recordar que el descontrol de las deportaciones fue lo que hace años detonó la invasión en la Plaza de la República, campamento improvisado que justamente empezó con la presencia de migrantes afuera del INAMI.