Con labores en otros estados de la república un militar decidió regresar a su ciudad natal (Tampico) para festejar el cumpleaños de su hijo, adornando de una manera peculiar su unidad personal para recorrer diferentes sitios de esparcimiento..
Además de laborar para el bien nacional, es un buen padre, pues no quiere que por nada del mundo el cumpleaños de su amado hijo pasara desapercibido, así que llegó de sorpresa a su casa con su carro llenó de stickers.
Por su trabajo pasa muchos días fuera de su casa, por lo que ante su llegada, el niño no pudo contener las lágrimas de felicidad al ver a su héroe de regreso y que además, le llevará un pastelito y muchos mensajes de amor escritos en cada uno de los stickers de colores.
Llamó la atención este vehículo al pasar por el bulevar perimetral en la Laguna del Carpintero, al principio la gente creyó que se trataba de dos enamorados, sin embargo, al acercarse pudieron contratar que se trataba de una sorpresa de padre a hijo, pues ambos comparten el mismo día de cumpleaños.
El padre de nombre Demetrio recordó que antes de que el pequeño Luis Octavio, desafortunadamente perdieron a un bebé por complicaciones en el embarazo, por lo que la llegada de su "cupido" como ellos lo llaman, fue para darles nuevamente felicidad dentro de su hogar hace 8 años.
Sin duda el mejor regalo para Luisito fue ver a su papá de regreso en casa, dispuesto a pasar todo el día con él, su mamá y su hermana, antes de que tenga que volver a sus labores en la milicia.