Estados como Puebla y, en general, el país, requieren replantear y repensar sus políticas ante dos fenómenos que están cambiando la dinámica de la sociedad: el envejecimiento y los migrantes “estacionados”, quienes ya están formando nuevas familias.
Así lo explicó Miguel Calderón Chelius, coordinador del Observatorio del Salario de la Universidad Iberoamericana Puebla, quien resaltó que la población está creciendo y no existen planes ni acciones para atender las nuevas necesidades.
“Una preocupación que está presente es la situación de la migración que sale de México hacia otros países, así como la migración que atraviesa el país para llegar a Estados Unidos, lo que nos obliga a repensar el país que somos y la actitud que tomamos hacia los migrantes” comentó.
El también coordinador de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública de la institución que forma parte del Sistema Universitario Jesuita resaltó que México vive una etapa de llegada de “caravanas de migrantes” que facilitaron su ingreso a territorio nacional pero complicaron su paso a Estados Unidos y ahora se encuentran “estacionados”.
En el marco del Congreso de la Asociación Latinoamericana de Población (ALAP) y de la presentación de la serie Diálogos con la Realidad, el especialista de la Ibero Puebla resaltó que el propósito de los migrantes centroamericanos no es quedarse en México, pero por distintas razones se están quedando.
“Están atravesando México se forma colectiva, lo cual, les facilita atravesar el país, les da mayor seguridad, pero les dificulta su ingreso a los Estados Unidos. Los migrantes centroamericanos son ahora, los jóvenes del barrio. El asunto es que, en este proceso, muchos se van a quedar, muchos se van a enamorar, van a echar raíces, como los mexicanos en Estados Unidos”, apuntó.
Ante la nueva realidad migratoria, México requiere analizar la situación y diseñar estrategias para enfrentar los nuevos retos que se que generan por los mexicanos que siguen migrando, como los que están regresando, así como los indocumentados que en su mayoría vienen de Centroamérica.
“Los migrantes no son una amenaza, son personas como nosotros que están buscando mejores oportunidades. Como país, tenemos la obligación moral e histórica de buscar las mejores condiciones para estar personas que están buscando un mejor futuro”, explicó.
Calderón Chelius agregó que otro reto que tiene México es un tema que está presente y, al parecer dormido, el proceso del envejecimiento de la población.
Nos vamos a enfrentar a una sociedad donde una gran parte de la población será adulto mayor, lo que nos obligará a reorganizar desde la vivienda hasta la estructura productiva”, apuntó.
MITM