Las Procesiones del Silencio volvieron a activarse la noche de este viernes santo, 15 de abril, en Puebla capital, San Andrés y San Pedro Cholula, Cuautlancingo, Huejotzingo, Tepeyahualco, Ahuazotepec, Quecholac, Zacapoaxtla y en diferentes regiones del estado.
Después de que por dos años las procesiones y concentraciones religiosas se suspendieron, los fieles católicos acompañaron y dieron el pésame a la virgen la noche de este viernes.
Tras la Pasión, Crucifixión y Muerte de Jesucristo, los fieles católicos acostumbran acompañar a Nuestra Señora de la Soledad, también llamada Virgen Dolorosa o Nuestra Señora de los Dolores en un recorrido en donde se llevan luces, cruces acompañadas con el sonido de tambores.
La Procesión del Silencio es una herencia de la época de la Colonia en distintas ciudades y comunidades poblanas para recordar la muerte de Jesús en la Cruz.
Al llegar la noche, los fieles realizan la procesión por diferentes avenidas en donde parte de los asistentes se colocan una capucha y cargan imágenes religiosas.
A diferencia de las Procesiones de Viernes Santo que se realizan al mediodía, en los caminos del silencio nadie habla ni hace ruido. Lo único que alumbra los recorridos son luces que portan parte de los fieles.
En la capital del estado, el Instituto Municipal de Arte y Cultura resaltó la importancia de la Procesión del Silencio desde del Templo de Nuestra Señora del Carmen para concluir las actividades del Viernes Santo.
CHM