El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, denunció que las legislaciones que se impulsan en el país y en los estados, la inseguridad y la crisis económica atentan contra el bienestar social.
Después de que la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) pospuso la discusión de la propuesta del ministro Juan Luis González Alcántara de prohibir la colocación de nacimientos o cualquier otro adorno o signo alusivo a la religión en espacios públicos y pagados con recursos del erario, el arzobispo denunció que se presenta una persecución contra la fe católica.
“En el tiempo que hoy nos toca vivir, encontramos escenarios difíciles, inclusive de persecución de otro tipo, como por ejemplo, la ideológica o las legislaciones hostiles que atentan contra nuestra fe e identidad cristiana”, destacó el arzobispo.
A nivel nacional se presenta una discusión por la colocación de los llamados Nacimientos de Jesús en lugares públicos. Por un lado, un quejoso de Yucatán se inconformó contra símbolos católicos en lugares públicos; y, por otro lado, organizaciones de la sociedad civil, afines a la Iglesia católica, pidieron a la SCJN desechar la sentencia, la cual calificaron como un agravio contra la Iglesia católica.
En este contexto, Sánchez Espinosa lamentó que se presente un clima de división y confrontación en medio de la violencia, factores que fragmentan a la sociedad. “El clima de violencia y confrontación, y la inseguridad generan y fragmentan nuestra vida social. Generan delincuencia, generan inseguridad y amenazan con robarnos la calma”, explicó.
Sánchez lamentó que se presenten diferentes tipos de agresiones contra la sociedad y contra sus núcleos, las familias.
“Se suman los distintos tipos de agresión que se presentan en los grupos sociales por ciudadanos comunes, en pueblos, colonias, en los propios núcleos familiares”, resaltó.
Señaló que los problemas de salud generados por la pandemia se agravan en las familias ante los signos de violencia y la crisis de violencia.
“Además de los problemas de salud que hemos vivido agudizados por la pandemia; de la pérdida de valores, de la cultura de muerte en sus múltiples expresiones, la polarización social y la crisis económica han llegado a ser amenazas crecientes, pareciera que todo está echado a perder, que el mal está venciendo al bien”, manifestó.
CHM