El responsable del Albergue “la Sagrada Familia” de Apizaco, Elías Dávila Espinosa, dio a conocer que durante el mes de octubre el número de migrantes fue de 648, esto indica que el número de centroamericanos que se alojaron durante el décimo mes del año se triplicó en comparación con septiembre y agosto.
“El flujo se va recuperando ahorita anda en alrededor del 70 o 75 por ciento en comparación con lo que teníamos el año pasado, a partir de septiembre si hemos visto un incremento importante y la característica es que es un flujo intermitente porque hay semanas donde hay grupos vulnerables de 100 o más y otras semanas que no pasan de 20”, señaló.
En otro sentido expuso que en el estado de Tlaxcala continúan las violaciones a los derechos humanos de los migrantes, lo cual es motivo de una profunda preocupación.
Manifestó que recientemente tres jóvenes migrantes fueron objeto de agresiones físicas y los despojaron de sus pocas pertenencias, “les robaron el dinero y objetos valor que en realidad son pocos, pues durante su travesía viajan con lo realmente indispensable”.
Los afectados al llegar al albergue narraron lo que les había pasado, pero resulta que los ladrones fueron presuntamente elementos de seguridad del estado de Tlaxcala, “lamentablemente por su desconocimiento no supieron decir si eran policías estatales o municipales, solo refieren que se trataba de uniformados quienes les habían robado el podo dinero que aún les quedaba”.
Agregó que los afectados prefirieron no presentar ninguna denuncia por obvias razones, “es lamentable porque de ser verídico lo que ellos cuentan, denota que los mismos elementos de seguridad forman parte de los peligros a los que se encuentran los migrantes en todas partes del país”.
Elías Dávila, agregó que los riesgos ahora de salud no intimidan a estas personas, viajan sin las mínimas medidas de protección contra el covid-19, no usan cubre bocas muchos menos gel-alcohol.
Además, reveló que hasta el momento no se ha tenido ningún caso de covid-19 entre los migrantes que han llegado al albergue; “si llegan personas enfermas de las vías respiratorias, pero de inmediato son revisados para descartar cualquier situación del virus, incluso desde su llegada a todos se les toma la temperatura y se les hacen diversas preguntas para valorar su estado de salud”.
Por último, se pronunció porque las autoridades continúen con las capacitaciones a sus elementos de seguridad, para que estén conocedores del respeto a los derechos humanos y sobre cómo actuar con los migrantes.
AFM