La sección 23 del Sindicato Nacional de Trabajadores dela Educación (SNTE) que agrupa a más de 58 mil docentes en activo y más de 18 mil jubilados en el estado quienes son pagados por la federación, reveló deficiencias y carencias en el sistema de seguridad social ante la falta de medicamentos, especialistas y clínicas y tiempos de espera de entre tres y seis meses para recibir una consulta.
Alejandro Ariza Alonzo, secretario general de la sección 23 del SNTE, explicó que el Instituto Nacional de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), enfrenta retos como la falta de médicos.
“Tenemos un ejemplo claro de los problemas en el sistema de seguridad social: en Puebla, el ISSSTE tiene contratados a sólo tres médicos especialistas en geriatría para atender una población creciente de más de 18 mil profesores jubilados”, comentó.
Tras poner en marcha la Consulta para la Construcción del Pliego Nacional de Demandas para el Mejoramiento de la Seguridad Social, Ariza Alonso comentó que existen pendientes como la falta de medicamentos.
“Vemos no sólo se tiene la falta de espacios como clínicas y unidades médicas regionales, tenemos la demanda del cuadro básico de medicamentos; además, hoy nos enfrentamos a una nueva problemática, la carencia de médicos especialistas que obliga a maestros y sus familiares esperar de tres a seis meses para ser consultados”, comentó.
Frumencio Álvarez Rivera, responsable de la secretaría de Pensionados y Jubilados de la sección 23 del SNTE, explicó que en el ISSSTE existe un desabasto de medicamentos para el tratamiento de enfermedades crónico-degenerativas.
“Si queremos hablar de calidad de vida, las enfermedades degenerativas son el principal problema al que se enfrentan los maestros que cumplen 30 o más años de servicio. Después de entregar gran parte de su vida en las aulas, la diabetes, la hipertensión y la falta de medicamentos en las clínicas, unidades familiares y hospitales, son las verdaderas complicaciones en la salud de los trabajadores de la educación en el país”, comentó.
Agregó que el ISSSTE enfrenta una insuficiencia en módulos de atención familiar, clínicas y hospitales, ya que no se cuenta con la capacidad suficiente en la infraestructura para atender a los trabajadores de la educación.
“En la realidad que enfrentan los trabajadores jubilados y sus familias, que son más de 18 mil los trabajadores y en global con familiares asegurados suman alrededor de 50 mil derechohabientes, es la falta de especialistas como son geriatras y tanatólogos”, apuntó.
Agregó que las instalaciones de clínicas y hospitales carecen de rampas e infraestructura para el tránsito de los jubilados y pensionados. “Imagine el problema al que nos enfrentamos en sólo un ponto de los servicios médicos”.
Ariza Alonzo comentó que durante la Consulta para la Construcción del Pliego Nacional de Demandas para el Mejoramiento de la Seguridad Social que se realizará hasta el 29 de marzo en la sección 23 del SNTE, los docentes en activo y jubilado, podrán presentar todas sus demandas y propuestas, las cuales, serán integradas al Plan Nacional de Demandas del SNTE, el cual, durante las negociaciones de este año, se entregarán al gobierno federal.
ARP