Integrantes de los grupos organizados de los Salones de Fiestas Infantiles protestaron este miércoles afuera de la Secretaría de Salud, debido a que no han sido considerados en los programas de reapertura por parte del gobierno del estado, que los mantiene cerrados ante la pandemia por el covid-19.
Claudia Rivera, representante de los manifestantes, comentó que, a casi un año de los cierres por la pandemia, los negocios registran pérdidas millonarias y han afectado a más de 6 mil personas.
De los 300 salones de fiestas infantiles que había en el estado, dijo que actualmente solo quedan 125, y la mayoría está en riesgo de un cierre definitivo.
"Estamos por cumplir un año de permanecer cerrados. En marzo se cumple un año y a pesar de que nos prometieron que para enero tendríamos una respuesta, es fecha que no nos han respondido ni atendido las autoridades del estado", declaró.
Al entregar un documento dirigido al secretario de Salud, Manuel de la O, señalaron que han cumplido con todos requerimientos y las medidas, sin embargo, no han recibido una respuesta clara de las autoridades de salud.
Perla Moreno, otra de las manifestantes, comentó que es incongruente que se cierren los salones de fiestas infantiles, y se permita que haya niños en el metro, transporte público y en las calles.
Resaltó que sus problemas cada vez son mayores debido a que han tenido que vender todo y ya se presentó el primer caso de una persona que se suicidó por no soportar la presión de las deudas que esto les ha provocado.
Ambas representantes aseguran que todos los establecimientos cumplen con las medidas de sanidad y la apertura de sus negocios podría permitir que los niños tengan donde jugar y divertirse, en lugar de hacer reuniones de más de 10 personas y de forma clandestina.
"No es posible que se impida que abran los salones de fiestas infantiles y sí se permita la apertura de los casinos donde van más adultos mayores y personas de riesgo, es incongruente", explicó.