La suspensión de actividades en el sector de la construcción impacta de manera directa en 25 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del estado y afecta a más de 500 mil poblanos que se mantienen sin recibir recursos o vieron reducidos sus ingresos ante la contingencia generada por el coronavirus.
De acuerdo con el análisis “Retos para el campo de la construcción después de la pandemia del covid-19”, realizado por Marco Antonio Fernández Casas, investigador de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), el sector de la construcción en Puebla es uno de los más importantes para la entidad y su importancia está casi al mismo nivel que el sector de la industria automotriz.
A pesar de que parte de la industria de la construcción está catalogada como actividad esencial, el especialista destacó que, en la realidad la edificación y desarrollo de casas, edificios y obras viales están casi detenidas.
“El desempleo está en aumento y no hay una fecha para que se reinicien los trabajos, no sabemos el momento en que podamos reactivar la economía. La situación está delicada”, apuntó.
Destacó que, aunque de forma inicial, se tiene programado que, para el 1 de junio, regresarán parte de las actividades económicas a la normalidad, el sector de la construcción tendrá mayores problemas porque requiere de diferentes factores para su reinicio y depende de otras industrias.
Comentó que tanto en el sector de constructores independientes como en el de las micro, pequeñas y medianas empresas, así como las grandes constructoras prevén una lejana una reactivación del sector.
mpl