Vacunación y aprendizajes, México a un año de la emergencia sanitaria por covid-19

A un año de la declaración de la emergencia sanitaria en el país, MILENIO habló con una experta en Biología Molecular sobre el avance en la vacunación, y recopiló testimonios de profesionistas afectados por el covid-19.

A un año de la emergencia sanitaria en el país | Especial
Fernanda Salinas
Ciudad de México /

Hace un año la vida cambió para todo el mundo. No se sabía a ciencia cierta lo que un virus era capaz de hacer. Arrebatar vidas, dejar las despedidas para un plano inexistente, vivir el luto día a día y no poder hacer nada más que cuidarte. Los negocios comenzaron a cerrar y los afortunados huyeron a su hogar. Aquel 30 de marzo de 2020 la vida cambió para México cuando el gobierno declaró emergencia sanitaria por coronavirus SARS-CoV-2.

Ese día, cuando el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, dio a conocer la declaratoria publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF), el país acumulaba 28 muertes por la enfermedad y mil 94 casos.

A un año de los hechos, el país acumula más de 201 mil decesos y más de 2 millones 400 mil casos estimados por la enfermedad. A un año, la lucha sigue siendo la misma. La luz de la esperanza brilló con el inicio de la vacunación y aunque es lenta, la gente da un respiro de paz al saber a sus padres y abuelos vacunados.

¿Qué ha pasado en este año?

  • Medidas sanitarias

Cuando no había vacuna y no se tenía una fecha para su desarrollo y llegada al país, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador estableció un equipo que encabezaría Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, quien en las conferencias diarias vespertinas y junto a José Luis Alomía, director de Epidemiología, Ricardo Cortés Alcalá, director de Promoción de la Salud y, en fechas recientes, Ruy López Ridaura, director del Cenaprece, darían a la población la información necesaria sobre este nuevo virus.

En una de esas conferencias, se presentó a Susana Distancia, quien ayudó a ejemplificar la distancia social de mínimo 1.50 metros que se debía tener con otra persona para disminuir el riesgo de contagio.

Asimismo, se implementó la suspensión temporal de actividades escolares, así como de actividades no esenciales, la suspensión de eventos de concentración masiva, el cuidado de adultos mayores por ser personas vulnerables.

  • Semáforo Epidemiológico

Cada entidad comenzó a mostrar un semáforo epidemiológico por la enfermedad que determinaba el tipo de actividades que estaban permitidas de acuerdo a la cantidad de contagios en la zona.

En el semáforo vigente del 29 de marzo al 11 de abril de este año, hay siete estados en color naranja, 18 en amarillo y siete en verde.

Casos de coronavirus… ¿a la baja?

En entrevista para MILENIO, Roselyn Lemus-Martin, doctora en Biología Molecular y Celular por la Universidad de Oxford, explicó que la disminución de casos de coronavirus se debe a una reducción en la aplicación de pruebas para detectar la enfermedad, y que si bien la ocupación hospitalaria ha ido a la baja, hay una gran probabilidad de que se presente un repunte en los contagios pasada Semana Santa.

“Al mismo tiempo que supuestamente están disminuyendo los contagios también están disminuyendo las pruebas. Sí disminuyó la ocupación hospitalaria, no se ha visto en niveles como se vieron en enero pero es muy seguro que va a haber un repunte en las siguientes semanas después de Semana Santa”.
“Un repunte como tal sí se está esperando a partir de Semana Santa, como dos semanas después, porque muchas personas están viajando, ya se relajaron las medidas en la Ciudad de México y en otros estados. Obviamente esto va a contribuir a que aumenten los contagios sobre todo porque la vacunación se está haciendo muy lenta. Todavía no se ha terminado de vacunar al personal de salud ni a los adultos mayores”, abundó.

Cientos de turistas abarrotaron la playa de Progreso. (Cuartoscuro)

¿Tercera ola o repunte?

La especialista reconoció que es epidemiológicamente incorrecto decirle tercera ola porque “una ola como tal hubiera sido que hubiera habido una disminución completa o una disminución muy clara del contagio y en la curva epidemiológica nunca se observó eso”.

Explicó que México se quedó en una meseta y en esa meseta están habiendo el mismo número de contagios por día, pero aún así son altos.

“Todavía no hay una disminución muy clara, entonces para hablar de una tercera ola, es que hubiera realmente bajado la curva y que vuelve a subir. Entonces en realidad es un repunte”.

Miles de personas saturaron la Terminal 1 del AICM | Juan Carlos Bautista

La carrera por la vacuna

Respecto al esfuerzo realizado por miles de científicos e investigadores para lograr obtener no sólo una, sino varias vacunas contra el SARS-CoV-2 en un periodo récord, la doctora Roselyn detalló que hubo muchos factores por los que se logró un biológico en tan poco tiempo, uno de ellos es la investigación de respaldo que ya se estaba explorando desde hace décadas.

“En el caso de la vacuna de Oxford-AstraZeneca, la tecnología ya se estaba probando en otro virus. La molécula de RNA ya se estaba estudiando por décadas, entonces todo esto ayudó a que una vez que llegó la pandemia ya se tuvieran esas herramientas; nunca se habían desarrollado este tipo de vacunas y afortunadamente funcionó y los estudios clínicos se realizaron en paralelo las fases”.

La también maestra en Oncología Molecular por el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas de Madrid, apuntó que otro factor importante fue el financiamiento por parte de diferentes países que se unieron con universidades.

“Estados Unidos inyectó millones de dólares para desarrollar muchas vacunas por ejemplo la de Pfizer, Moderna, hubo interacciones entre farmacéuticas y universidades”.
La OMS recomendó seguir utilizando la vacuna AstraZeneca contra coronavirus | Reuters

El lento avance en la vacunación mexicana

Sin duda, el rumbo de la situación por el virus en el país comenzó a cambiar con el inicio de la vacunación al personal médico que atiende la enfermedad, y posteriormente a los adultos mayores de 60 años en adelante que viven en zonas de mayor vulnerabilidad, pero Lemus-Martin, coincide en que el proceso ha sido tardado.

“Desafortunadamente México está vacunando muy lento, es muy pronto para ver algún efecto de la vacunación.”

Los factores, reconoce, son variados. El retraso lo atribuye a la falta de una estrategia clara y un líder que esté manejando todo, así como la tardía reacción del gobierno mexicano para la creación de convenios con farmaceutas.

“Por ejemplo Israel, Estados Unidos, ellos ya habían hecho contratos, ya habían hecho convenios muchísimo antes más que México porque incluso apostaron a vacunas que todavía no sabían si iban a estar listas o no se sabía si iban a ser exitosas y ellos apostaron por esas vacunas, hicieron contratos, convenios, varios meses antes que México. México se esperó hasta el final prácticamente
Obviamente estamos en este punto donde las farmacéuticas, es como una lista. Si alguien me compró 100 millones y me los compró en marzo, abril o mayo, le tengo que entregar a esos primero, antes que a alguien que me compró en diciembre y que me compró sólo 32 millones. En México no están llegando tan rápido porque obviamente hay otros países en la lista que se adelantaron muchísimo más a comprar las vacunas”, explicó.
Adultos mayores acuden a segundo día de vacunación covid-19 en CdMx | Araceli López

Reacciones adversas… ¿sólo en la vacuna covid-19?

Lemus-Martin aclaró que “las vacunas hasta el momento son seguras y efectivas a pesar de que se elaboraron en un tiempo récord” y que si bien ha habido reacciones adversas, no todas son fatales, ya que “es muy pequeño este porcentaje comparado con el número de personas ya vacunadas”.

“Las reacciones dependen mucho de cada persona. Hay muchos factores en conjunción, es muy bajo el porcentaje de personas que ha fallecido y muchas no se ha atribuido a la vacuna como tal; puede ser a que se hayan contagiado antes de la vacuna, que se contagiaron entre la primera dosis y la segunda o incluso se pudieron haber contagiado después de la segunda dosis. Hay muchos factores en juego que no tienen que ver para nada con la vacuna”.

Precisó también que todo medicamento y toda sustancia externa conlleva un riesgo, pero “las personas piensan que es sólo esta vacuna, nosotros tenemos riesgo con cualquier medicamento que estamos tomando”.

“Siempre hay un riesgo de cualquier efecto secundario, entonces no es como tal la vacuna”.
Un trabajador sanitario prepara una dosis de la vacuna contra el coronavirus | Reuters

Inmunidad ante contagios o vacunación

La especialista recordó que “las personas se van a seguir contagiando, vamos a seguir siendo positivos a la prueba porque las vacunas no están como tal evitando la transmisión del virus, el virus va a seguir entrando a mi cuerpo pero yo ya voy a estar mejor preparado para atacarlo y me voy a enfermar de diferentes formas pero me voy a seguir enfermando”.

Respecto a la supuesta inmunidad tras contagiarte o vacunarte, Roselyn Lemus-Martin advirtió a MILENIO que todavía no se ha determinado cuánta inmunidad hay ni siquiera por la enfermedad natural ni por la vacuna, “todavía no hay un tiempo que sabemos que la vacuna va a proteger o la enfermedad natural, el enfermarse. Todavía no sabemos exactamente el tiempo en que la persona va a estar protegida”.

La titular de la Sedesa llamó a seguirse cuidando pese a que las vacunas generan inmunidad contra las variantes | Jesús Quintanar

Medicamentos contra coronavirus

Lemus-Martin, también investigadora para nuevos medicamentos para coronavirus, precisó que los fármacos usados para tratar la enfermedad en pacientes graves no se desarrollaron durante la emergencia sanitaria, éstos ya existían y se probaron para covid-19.

Dexametasona, Remdesivir son medicamentos que ya están aprobados para otras indicaciones terapéuticas, ya habían sido desarrollados, no son nuevos, simplemente se probaron para covid-19 y esa es una de las estrategias que se siguen probando, usar medicamentos que ya existen, que es lo más fácil, y hay personas que estamos investigando desarrollarlos desde cero, que es lo que se sigue haciendo todavía”
“Se están aprobando algunos y se va a seguir porque desafortunadamente la vacunación no es la solución, no es que se vacunen y automáticamente todo va a llegar a como era antes. El virus va a seguir circulando y todavía no conocemos esa protección que la vacunación va a otorgar, por eso es la importancia de seguir desarrollando medicamentos”, concluyó.
La dexametasona es un medicamento usado en pacientes graves de covid-19 | AFP

Hechos y aprendizajes a un año de la pandemia

En un año tan complicado, la vida cambió para todas las profesiones y oficios. Entre ellas, en las que el virus es su lucha diaria, tal es el caso de María de Jesús Flores Rangel, enfermera, y quien desde hace 15 años labora en el Hospital “Enrique Cabrera”

Pese a que la inmunización en su centro de trabajo ya se realizó, no recibió la vacuna anticovid por ser un riesgo para ella debido a sus alergias. Haciendo una retrospectiva respecto al año pasado cuando iniciaba la pandemia, Mari reveló a MILENIO que su primera reacción al saber del virus fue de miedo.

“Fue de miedo, mucho miedo, fue la primera reacción que tuve porque nos enfrentábamos a algo que no conocíamos realmente y que no sabíamos cómo lo íbamos a manejar y en todo momento al recibir un paciente era de miedo”.

Aseguró que en todo momento en el hospital se les brindó el equipo de protección necesario y les dieron un curso básico de la enfermedad, pero “conforme fue pasando el tiempo, nosotros nos dimos a la tarea de investigar lo que realmente era y cómo se contagiaba para protección nuestra”.

Los cambios en su rutina diaria fueron evidentes.

“Todo cambió porque inmediatamente que llegas es cuidarte. Cubrebocas, guantes, todo. A la hora que entras y a la hora de la salida porque sabes que tienes que llegar a casa con la familia y no puedes llegar con un virus, una bacteria. Entonces antes de llegar a casa hay que desinfectarse y bañarse”.

La enfermera de 42 años de edad y quien padeció coronavirus, estuvo 15 días en reposo y se recuperó exitosamente, afirmó que lo más complicado de la pandemia ha sido sufrir la muerte de amigos, conocidos, pacientes y compañeros.

“Todo eso ha sido muy difícil para nosotros. Para mi más, ver morir a los mismos compañeros es muy complicado”.

Y ante las personas que siguen sin usar cubrebocas o seguir las medidas sanitarias, Mari contó que le da “mucho coraje e impotencia”.

“No se cuidan y tú los ves caminando en la calle sin cubrebocas; esto es de cuidarte, de no salir, pero la gente no entiende”.

El aprendizaje más grande que Mari se lleva a un año de estar luchando contra este virus, es que hay que valorar todo lo que tenemos.

“Yo creo que es un aprendizaje de vida, que hay que valorar todo lo que tenemos, en especial a la familia y pues vivir día a día porque realmente este virus es mortal y de un momento a otro te arranca la familia. Mi familia, mi esposo y mis hijos, son mi principal motivación, el seguir luchando por esto porque al final de cuentas ellos son los que se quedan y nosotros somos los que seguimos luchando”.

Foto: Cortesía

Para la educación, la pandemia significó un golpe muy fuerte. De estar en un salón donde había reciprocidad inmediata, contacto físico con amigos, compañeros y profesores, se pasó a una plataforma que cortó por completo la comunicación directa.

Eloísa Guzmán, licenciada en Pedagogía y actual docente de la Secretaría de Educación Pública (SEP) afirmó a MILENIO que “ha sido difícil el cambio (de lo presencial a lo virtual) porque he tenido que adaptarme a trabajar con diferentes plataformas. Nos capacitaron, me ha costado mucho trabajo pero lo he logrado”.

Uno de los principales retos a los que se ha enfrentado la docente, es al hecho de estar trabajando los contenidos frente a una computadora y no dejar de lado la cuestión emocional de los niños.

Ante esto último, explicó que trabajan activaciones de cinco a 10 minutos para que los alumnos se relajen y “bajen el estrés o ansiedad y permanezcan tranquilos durante la sesión”. Asimismo, reveló que la SEP implementó el trabajo socioemocional en el alumnado,

“Se planean actividades en donde conocen las emociones, las identifican y luego ya las empiezan a manejar o controlar. Por mi parte, también he trabajado actividades de gimnasia cerebral en donde nos relajamos y esto nos ayuda a que ellos cambien la actitud ante la clase y quieran aprender. Si nosotros motivamos y relajamos a los chicos, ellos tienen ganas de aprender en este momento tan complicado”.

Uno de los aprendizajes que Eloísa se lleva a un año de la pandemia es aprender a adaptarse a las diversas situaciones de la vida y reconocer su labor como académicos y su influencia en la motivación de los alumnos pese a cualquier circunstancia.

Foto: Cortesía

Para los alumnos tampoco ha sido fácil sobrellevar la pandemia, así lo aseguró Daniela Gutiérrez Almaguer, estudiante de octavo semestre en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, quien contó a MILENIO que en un inicio no imaginó que la emergencia sanitaria duraría tanto tiempo, “no esperaba que el virus fuera de esta magnitud”.

El cambiar un salón por el lugar más cómodo de tu hogar y permanecer ocho horas sentada para ingresar a las plataformas educativas donde los profesores continúan con las clases fue una situación que Daniela califica como difícil.

“Las clases en línea son algo nuevo para mí, para muchos, y estaba desconfiada en ese proceso y en este momento me sigo acostumbrando; es algo difícil y la motivación se pierde porque estudiar mientras hay una emergencia sanitaria de esta magnitud es muy complicado porque tu mente está en otra cosa, en que te tienes que cuidar tú, tu familia y estar encerrado tanto tiempo como que tu mente se cierra. La motivación de estudiar y aprender queda en segundo plano. Es muy complicado”.

Almaguer reconoce que dejar de lado las rutinas de horas para convertirlas en minutos como el despertar, cambiarse y tomar clases, se tornó tedioso y hay muchas distracciones de por medio.

“Mi rutina es muy chiquita, me despierto, me peino y me siento en mi escritorio. Las clases las tomo en mi cuarto, pero tienes muchas distracciones, entre asuntos familiares y cuestiones del exterior, se vuelve tedioso y es aburrido hacer todos los días lo mismo, en el mismo lugar”.

A un año de la pandemia, el aprendizaje que se lleva la alumna es el ser más solidario y responsable hacia con los demás.

“Yo creo que tienes que ser más solidario y responsables hacia los demás, porque si todos los ciudadanos hubieran sido más responsables, quedándose en casa si no tenían algo legítimo por lo que salir, el usar cubrebocas, saldríamos más rápido”.

Foto: Cortesía

Las actividades no esenciales también se vieron afectadas ante el decreto de la emergencia sanitaria en el país. Óscar Granados, dueño de un puesto de dulces en Benito Juárez, platicó a MILENIO que en abril del año pasado, las autoridades de la alcaldía le pidieron cerrar su negocio como una instrucción de gobierno para reducir la propagación del virus en la ciudad.

Asimismo, reconoció que tuvo afectaciones económicas y las ventas aún no se estabilizan en un buen nivel.

“Tuvimos que cerrar por abril y regresamos hasta septiembre. Nos sostuvimos con lo que tenía ahorrado, pero se echó a perder mucha mercancía, muchos dulces se caducaron y la tuvimos que tirar”
“Bajaron mucho las ventas, como un 70 por ciento, porque muchos aún están trabajando en su casa; hay muy poca gente y la situación económica está dura”.

Al estar en contacto con los clientes y con el dinero que recibe por sus productos, Óscar se las ingenió para evitar, a su posibilidad, un posible contagio de covid-19.

“Me pongo doble cubrebocas, traigo lentes, pusimos un plástico, y a veces uso guantes; todo el dinero que llega lo sanitizo con alcohol. Cuando luego están mojadas las monedas o billetes les digo a los clientes “es alcohol”.

Por su edad, 67 años, es candidato a recibir la vacuna contra coronavirus y aseguró que en cuanto la campaña de inmunización llegue a su alcaldía se aplicará la dosis.

“Es lo que yo más quiero, el chiste es que ya se acabe esto para cada quien”.

A un año de vivir esta situación y no poder quedarse en casa porque su sustento familiar depende de las ventas realizadas, Óscar compartió que un aprendizaje de la pandemia “es cuidarse mucho porque uno es vulnerable al virus”.

“De ahora en delante te vas a acostumbrar a cuidarte más, a seguir las medidas sanitarias, a no agarrar cualquier objeto”.


FS

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