La diputada local Yarabi González Martínez presentó una iniciativa de reforma al Código Penal en materia de violación infantil con lo que se incrementan las penas en los casos de violación infantil hasta 30 años de prisión.
Objetivo dela iniciativa
Indicó que la iniciativa tiene como objetivos la disuasión del delito, justicia para las víctimas, la protección de los derechos de los menores y la prevención de la reincidencia.
La iniciativa plantea que comete el delito de violación quien por medio de la violencia física o moral realice cópula con persona de cualquier sexo y se le impondrá prisión de ocho a 30 años y multa de 200 a 400 veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización.
Si se ejerce violencia y si se tratase de sus familiares de cualquier grado o de persona vinculada afectivamente a la víctima se aumentará en una mitad la punibilidad que corresponda.
Al que tenga cópula con persona mayor de 15 y menor de 18 años, obteniendo su consentimiento por medio de engaños, se le aplicará una pena de dos a seis años de prisión.
La iniciativa plantea también que se aumentará una mitad a la punibilidad correspondiente si el pasivo del delito fuere cometido por un ascendente contra su descendiente consanguíneo en línea recta, hermano contra su colateral, el tutor contra su pupilo, adoptante, adoptado, cónyuge o concubino, en relación al autor o partícipe, además de la pena el culpable perderá la patria potestad o tutela.
“La ampliación de las penas por violación infantil en nuestro estado puede ofrecer múltiples ventajas desde la disuasión del delito hasta el fortalecimiento de la justicia y la protección de los derechos de los niños”, sostuvo Yarabi González.
Mencionó que durante el 2020, de acuerdo con la Red de los Derechos de las Infancias en México, el estado de Hidalgo fue la sexta entidad en México en la que más casos se atendieron en hospitales a niñas, niños y adolescentes por violencia sexual, “siendo que nueve de cada diez víctimas eran niñas, es decir el 87.3 por ciento”.
Agregó que los principales agresores fueron personas cercanas distintas del padre o el padrastro, “de igual manera se identificaron a poblaciones indígenas y con alguna discapacidad víctimas de este mismo flagelo”.
Subrayó que el abuso sexual infantil es una de las formas más agresivas de violencia contra la infancia y ello, apuntó, deja efectos devastadores en la vida de las niñas y niños que lo sufren.
“El abuso sexual infantil implica la trasgresión de límites íntimos y personales de las niñas y los niños, la violación infantil es un delito de extrema gravedad que causa daños irreparables tanto a las víctimas como a la sociedad en conjunto”, concluyó.