En tiempos de la pandemia del Covid-19, el Pleno del Senado sesionó este jueves entre guantes de látex, cubrebocas, gel y toallas antibacteriales; así como una limpieza de por lo menos cada 10 minutos y sin la sana distancia. Incluso, hubo legisladores que ya se hicieron la prueba de coronavirus, la cual fue negativa.
La priista Vanessa Rubio no asistió a la sesión pues presentó un cuadro infeccioso en la garganta. Servicios médicos del Senado la apoyaron con la prueba del coronavirus la cual salió negativa.
Sin embargo, los especialistas la mandaron una semana de reposo con medicamentos, y este jueves fue dada de alta.
Las distintas bancadas han sesionado durante más de 8 horas y no se ha respetado la “sana distancia”, debido a que los escaños se encuentran separados por menos de un metro.
Kenia López, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos llegó al Senado con cubrebocas y guantes de látex. La mayoría de los legisladores colocaron un gel antibacterial personal en su lugar.
Sin embargo, trabajadoras del Fonatur, encabezadas por Fabiola Franco, fueron las encargadas de limpiar la tribuna cada que un legislador pasaba. También, por instrucciones de la presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández, se limpiaron cada uno de los escaños durante la sesión. La morenista pidió un aplauso para la trabajadora que ayudó a mantener limpio el Pleno.
Con información de Angélica Mercado
jlmr