El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que ayer fue un día difícil para México tras el sismo de magnitud 7.7, con epicentro en Michoacán; sin embargo, consideró que se tuvo suerte, debido a que el temblor no causó daños graves.
En La Mañanera desde Palacio Nacional, López Obrador lamentó el fallecimiento de dos personas a causa del sismo, pero celebró que la población haya sabido actuar.
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"Ayer fue un día difícil pero la gente supo comportarse, con aplomo y tuvimos suerte porque fue como aquí se dijo un temblor de considerable intensidad, y es lamentable la pérdida de las vidas humanas aunque sean dos, pero no pasó a mayores.
"Así como se puede decir, qué mala suerte que el mismo día, a la misma hora, sí, también es lo otro: Qué buena suerte de que no pasó a mayores. Ya cada quien que haga sus reflexiones pero por lo que a mí corresponde como gobernante del país, podría decir que el resultado no fue tan dramático, tan grave afortunadamente", dijo.
Ayer ocurrió un sismo de magnitud 7.7, con epicentro en Michoacán, el cual se sintió en varios estados del país, pocos minutos después de que se realizó el Simulacro Nacional 2022, que se hace cada año para conmemorar los dos sismos de septiembre de 1985 y 2017.
El sismo fue el tercer temblor que ocurre en México un 19 de septiembre y dejó daños en entidades como Colima, Ciudad de México y Michoacán, así como dos personas fallecidas.
FLC