El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, dijo que México ha cumplido con el acuerdo alcanzado en junio con Estados Unidos para reducir la migración centroamericana hacia ese país, días antes de que venza el plazo para evaluar resultados del pacto.
"Nosotros hemos hecho todos los compromisos que quedamos, incluyendo (...) el respaldo al plan de desarrollo integral y el inicio de acciones en Centroamérica", dijo Ebrard en conferencia de prensa en la capital salvadoreña junto al presidente Nayib Bukele.
Ebrard sugirió que Estados Unidos debería sumarse al Plan de Desarrollo Integral para Centroamérica y así responder a la crisis migratoria que ha ocasionado la violencia y la inseguridad en la región.
“Estados Unidos podría invertir más de 2 mil millones de dólares al año, sólo en El Salvador si hacemos un esfuerzo proporcional, si México pone 100, Estados Unidos por el tamaño de su economía debería poner 2 mil millones”, señaló el canciller.
Durante la puesta en marcha del programa Sembrando Vida, en El Salvador, el canciller dijo que precisamente estas acciones son un ejemplo de que si se quiere, se puede acabar con la migración.
“Es la mejor respuesta que podemos dar en la situación que nos encontramos, 20 mil empleos de aquí a diciembre con un esfuerzo conjunto de 31 millones de dólares, imagínate lo que podríamos lograr si tanto Estados Unidos como otros países del mundo nos ayudan”, añadió Marcelo Ebrard.
En el encuentro Ebrard puntualizó que en la migración todos son corresponsales.
“Por qué, pues porque hay tránsito de personas, porque las personas llegan a EU, sufren mucho allá en la frontera, todos somos corresponsales y por eso estamos aquí. En síntesis la mejor respuesta a las políticas que son contra los migrantes es reducir la migración forzada por la pobreza”.
Aseguró que con este plan de Desarrollo demostrarán a todos aquellos países que quieren construir muros que sí se puede salir adelante y acabar con “la epidemia de la migración”.
“Las ideas que predominan en muchos países son contrarias a las que estamos, hay países que están haciendo muros, hay otros que están cerrando la posibilidad de asilo, hay otros que están tomando medidas en contra, pero pensamos que aunque tengamos el viento en contra, aunque tengamos marea en contra, vamos a salir adelante porque somos grandes pueblos y porque tenemos razón”, finalizó.
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El acuerdo de junio desactivó la amenaza de aranceles a productos mexicanos, pero aún queda pendiente la discusión de que México se convierta en tercer país seguro para los solicitantes de asilo en Estados Unidos.
Ser un "tercer país seguro" supone que la nación latinoamericana albergaría a quienes soliciten asilo en Estados Unidos y que hayan pasado por su territorio. Sin embargo, México ha rechazado aceptar la propuesta de Washington, mientras sigue recibiendo miles de migrantes que esperan la resolución de sus trámites migratorios en Estados Unidos.
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