Avanza tipificación de la "reconversión sexual"

La diputada, Beatriz Villegas, consideró que se trata de una práctica discriminatoria al señalar a persona como "enferma" por tener una orientación sexual distinta.

Llamó a erradicar tratamientos sicológicos y psiquiátricos con tratos crueles , inhumanos y degradantes.
Claudia Hidalgo
Toluca /

Los integrantes de las comisiones legislativas acordaron analizar con más calma las sanciones a quienes impongan terapias de reconversión sexual y revisar la penalidad propuesta, con la posibilidad de imponer penas mayores a lo propuesto, acorde con lo planteado a nivel federal, de dos a seis años de prisión y hasta 12 años si se trata de menores de edad.

Las diputadas y diputados estimaron que durante la siguiente sesión se podrá dictaminar esta iniciativa de la diputada Beatriz Villegas, del grupo parlamentario de Morena, quien propuso sancionar con penas de uno a tres años de prisión a quienes incurran en este delito.

La legisladora indicó que es necesario tipificar y sancionar esta conducta por considerarla una práctica discriminatoria donde se vende la idea que una persona está enferma por tener una orientación sexual distinta, sometiéndose a tratamientos sicológicos y psiquiátricos mediante tratos crueles , inhumanos y degradantes.

Las posturas del tema

Del PAN, José Antonio García García, pidió no generalizar y dejar a los mexiquenses en libertad de decidir si quieren recurrir a una terapia o el tratamiento que pudieran considerar conveniente, por lo cual pidió revisar el tema con más calma para fortalecer la iniciativa y respaldar el respeto a los derechos humanos.


Juan Maccise Naime, del PRI, dio a conocer que este tema avanza en varios lugares del mundo, en especial en Estados Unidos, sobre todo se alerta de los casos donde hay violencia.

Gerardo Ulloa Pérez, de Morena, refirió que en el Senado se analiza un tema similar y ahí se propone castigar esta conducta con penas de dos a seis años de prisión y del doble cuando se trate de adultos mayores o menores de 8 años o con alguna discapacidad.

Alicia Mercado enfatizó que estas llamadas terapias de conversión o de reorientación sexual, son prácticas discriminatorias y se convierten en actos de tortura que operan en la clandestinidad.

María Luisa Mondragón Mendoza, del PVEM, subrayó que no hay nada que curar porque el tener una orientación sexual distinta no es una enfermedad y pidió sean sancionada cuando sea una conducta desplegada por profesionales de salud, pues este sector pueden inducir con mayores herramientas a vender algo que no resulta necesario.

La presidenta de la comisión de Gobernación, Mercedes Colín Guadarrama, refirió que existe coincidencia en la necesidad de analizar con mayor detenimiento este tema, para fortalecerlo, ver la penalidad e incluso invitar a especialistas para tener más elementos de este tema.


KVS

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