A partir de hoy y hasta el 19 de octubre de 2021, el empresario Marco Antonio González Castillo estará al frente del Comité de Participación Ciudadana (CPC) y por ende del Comité Coordinador del Sistema Estatal Anticorrupción que inicia su cuarto año de vida en el Estado de México.
El economista con especialidad en administración pública, sustituye en el cargo a Alberto Benabib Montero, quien cumplió su año frente al cargo, donde expresó su preocupación por el bajo nivel de cumplimiento de los municipios en su lucha contra la corrupción, pues sólo están conformados 50 de los 125 que deberían estar integrados.
Otros 16 casos, dijo, están en algún proceso de instalación y 59 más no han mostrado ni una sola evidencia de querer cumplir un mandato legal que debió atenderse desde las administraciones anteriores y que seguirá siendo una asignatura pendiente para completar la lucha contra la corrupción.
La puesta de su gestión
Para el nuevo presidente, Marco Antonio González, las elecciones municipales de 2021 serán una gran oportunidad para que los ciudadanos califiquen a los candidatos que busquen la reelección y a los partidos que se comprometieron con la lucha contra la corrupción, la transparencia y la rendición de cuentas; donde la mayoría deja mucho que desear.
Por ahora, dijo, el reto del CPC y del CC es visibilizar al sistema porque la sociedad no percibe que los resultados sean los adecuados o suficientes. “Creo que aquí lo que hace falta es comunicar mejor lo que se está haciendo en cada una de las seis instancias de gobierno dedicadas al combate a la corrupción”.
Ya durante el primer año se dedicaron los esfuerzos a construir la estructura jurídica que había que darle al sistema para que funcionara como tal, luego para trabajar en equipo y de manera coordinada, ahora es momento de incrementar esa coordinación y lograr una verdadera visibilidad.
Aunque se trata de una institución nueva, señaló, con apenas tres años de vida, debe comunicar mejor y mostrar su utilidad y aciertos.
“Hay que trabajar mucho con la ciudadanía para que la cultura de la denuncia sea mucho más eficiente y den el paso de llegar a la denuncias y no quedarse sólo en el señalamiento, porque en la lucha contra la corrupción todos somos corresponsables”.
Además, resaltó que se deben identificar los espacios de mayor riesgo en materia de corrupción y trabajar para disminuirlos, a través de un enfoque sistémico para que no sean vulnerables los procedimientos y en casos como el Dictamen Único de Factibilidad se observen todas las medidas de seguridad y prevención para evitar corrupción y alentar la inversión.
Insistió en la necesidad de perfeccionar los sistemas de las áreas de mayor riesgo y transparentarse para que cualquier ciudadano vea en cualquier etapa cómo va su procedimiento.
Y ante este nuevo escenario, en el cual se va a actualizar la Constitución de la entidad, esperar a conocer cómo se va a insertar el tema y al mismo tiempo, dilucidar y abonar a la inclusión de los principios que deben regir a toda administración pública eficiente y transparente.
MMCF