En Puebla, en promedio, 25 por ciento de electores nombran al gobernador y a los integrantes del Congreso local al tomar en cuenta que, de más de cuatro millones 500 mil electores, poco más de un millón 100 mil eligen al candidato ganador y más de 32 por ciento de electores se abstienen de acudir a las urnas el día de las elecciones.
De acuerdo con análisis realizados a los resultados de las elecciones históricas organizadas por el Instituto Electoral del Estado (IEE) de Puebla, dentro del estado, cuando se presenta una baja participación de los electores, es menor el número de votantes que nombra a un gobernador y a los diputados locales; además, existen procesos locales en donde domina el abstencionismo.
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Los candidatos de las coaliciones y partidos políticos que se convirtieron en mandatarios electos en Puebla consiguieron 45.65 por ciento del total de los votos emitidos durante los procesos electorales de 2004, 2010, 2016, 2018 y las extraordinarias de 2019. En otras, palabras, los gobernadores electos lograron el apoyo de uno de cada cuatro ciudadanos registrados en el padrón electoral.
Para las elecciones de 2024, en Puebla, la cifra para para que las coaliciones y los partidos políticos ganen la gubernatura y dominen el Congreso local se encuentra en obtener más de un millón 115 mil sufragios, es decir, conseguir el 45.6 por ciento de la votación, que a su vez se traduce en conseguir más de 25 por ciento del padrón electoral.
Durante las elecciones de los últimos 20 años, la participación del listado nominal, es decir, de las personas con derecho y credencial para votar que acuden a las urnas para nombrar a su gobernador y a los diputados locales es de 51.6 por ciento.
Los comicios extraordinarios de 2019 para nombrar al fallecido gobernador, Miguel Barbosa Huerta, se registró una votación de 33.41 por ciento; es decir, se registró un abstencionismo de 66.59 por ciento.
En tanto, en las elecciones de 2018, cuando ganó Martha Erika Alonso, quien falleció en el accidente del helicóptero en el que viajaba el 24 de diciembre de ese mismo año, se registró una participación de 67.64 por ciento, en otras palabras, no acudieron a votar tres de cada cuatro electores.
En las elecciones del 5 de junio de 2016 que fueron ganadas por Antonio Gali Fayad, la participación de los poblanos fue de 44.67 por ciento, es decir, se registró un abstencionismo de 55.32 por ciento.
Antes, en el proceso electoral de 2010, año en que el gobernador, Rafael Moreno Valle, quien fue candidato de la alianza Compromiso por Puebla compuesta por Partido Acción Nacional (PAN), Partido de la Revolución Democrática (PRD), Convergencia y Partido Nueva Alianza (Panal), ganó los comicios, la participación fue de 57.1 por ciento.
Durante las elecciones de 2004, proceso en el que Mario Marín Torres, candidato del PRI, resultó electo, la participación fue de 55.2 por ciento, es decir, el abstencionismo fue de 44.8 por ciento del padrón.
En los comicios de 1998, Melquíades Morales Flores, candidato del PRI, registraron una participación de 54 por ciento, es decir, se registró un abstencionismo de 46 por ciento. Antes, en 1992, cuando ganó Manuel Bartlett Díaz, se presentó a votar 39.5 por ciento de los electores; y en los comicios de 1986, año en que Mariano Piña Olaya resultó electo, la participación fue de 49.1 por ciento.
AAC