“¡Fueeera porros!”, “¡Fueeera porros!” fue el grito que retumbó entre los murales de David Alfaro Siqueiros, Juan O’Gorman y Diego Rivera, de parte de los cerca de 30 mil estudiantes y maestros de la Universidad Nacional Autónoma de México, así como padres de familia que se congregaron ayer por la tarde alrededor de la torre de Rectoría para exigir un alto a la violencia contra la comunidad estudiantil y la expulsión de los grupos que amedrentan desde hace años a los alumnos de esta institución.
En el mitin, los alumnos presentaron un pliego petitorio de siete puntos, que fue aprobado por la asamblea del CCH Azcapotzalco y al que respondió la Universidad calificándolo de “atendible”, además de invitar al diálogo a la comunidad de ese plantel.
La movilización culminó con saldo blanco, pese a que casi al final de la concentración se presentaron al menos 30 anarquistas, quienes con palos y tubos bloquearon por más de una hora la avenida Insurgentes a la altura de Rectoría e incluso lanzaron un petardo, pero sin dejar heridos.
Desde temprana hora, cientos de personas comenzaron a llegar a la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, desde donde partió la marcha principal. En un principio, el contingente no tenía pies ni cabeza. Nadie sabía hacía dónde caminarían o en qué momento.
Media hora después de la cita, a las 13:30 horas, salieron los líderes de la facultad junto con estudiantes del CCH Azcapotzalco para encabezar al nutrido grupo que conforme pasaban los minutos aumentaba considerablemente.
“¡Goya, goya, cachún, cachún, ra, ra, cachún, cachún, ra, ra... Goya, Universidad!” coreaban miles de voces mientras la marcha avanzaba por el circuito Mario de la Cueva de Ciudad Universitaria.
Pero no fue la única porra: el clásico “Huélum” del Instituto Politécnico Nacional también fue coreado por las decenas de estudiantes del Poli que acudieron en solidaridad con la comunidad universitaria y que fueron recibidos con aplausos y gritos de euforia: “¡Ese apoyo sí se ve!, ¡ese apoyo sí se ve!”.
“No pueden dividirnos, al contrario nos están uniendo más”, se leía en una pancarta de Rosa, estudiante de Filosofía.
Así, unidos, caminaron por el circuito entre las distintas facultades mientras se unían más estudiantes. Dos horas después, la vanguardia entró a la gran explanada universitaria conocida coma Las islas, la atravesó y llegó a su destino: la torre de Rectoría.
Al ver la cantidad de manifestantes que se congregó alrededor de Rectoría, los organizadores de lo que se convirtió en una gran marcha expresaron: “Nos rebasó, la convocatoria nos rebasó”.
El reto era lograr que todos escucharan el mensaje que se iba a dar, pero sin bocinas, eso fue imposible: “Préstennos un sonido, banda, una bocina”, gritaban los oradores desde la marquesina de Rectoría, que tiene como vigilante el mural El pueblo a la Universidad, de Siqueiros.
LAS PETICIONES
Los estudiantes del CCH Azcapotzalco solo lograron obtener un altavoz con el que leyeron los siete puntos de su pliego petitorio.
1. Se exige la correcta asignación de docentes a cada asignatura, acorde a los grupos existentes en ambos turnos y se considere la capacidad y el mobiliario de las aulas.
2. El alumnado tendrá conocimiento previo del historial profesional de los docentes que se postulen y que al realizarse su elección se lleve a cabo una consulta con la comunidad del plantel.
3. La autoridad tendrá la obligación de respetar, no cohibir y no intervenir en las expresiones político-culturales de la comunidad estudiantil, tales como murales y actividades recreativas. Además de dar un mantenimiento para preservarlos.
4. Justificación y transparencia de las labores administrativas y del presupuesto asignado al plantel durante la administración de la ex directora Guadalupe Márquez Cárdenas y de las futuras administraciones.
5. La solución a problemáticas: acoso, seguridad del plantel, atención a los programas de sendero y transporte seguro.
6. Realizar acciones para la desarticulación, destitución y expulsión de grupos porriles y de aquellas personas que los promueven y los protegen.
7. Que no exista ningún tipo de represalia física o académica contra cualquier estudiante que haya participado de alguna forma en este movimiento estudiantil.
Fueron pocos los que lograron escuchar el mensaje y al no haber más, los miles de estudiantes se mantuvieron en el lugar aprovechando la acústica para gritas “goyas” y más.
Momentos después vino la respuesta de la UNAM, que apuntó como “aceptables” y “atendibles” las demandas del estudiantado, y convocó a los miembros de la Asamblea General del CCH Azcapotzalco a instalar una mesa de seguimiento en el Colegio de Ciencias y Humanidades para la atención y posible solución de sus planteamientos.
IRRUMPEN ANARCOS
Casi al final de la concentración, un grupo de anarcos rompió la tranquilidad con varios conatos de violencia que no pasaron a mayores. Bloquearon avenida Insurgentes Sur y lanzaron un petardo que provocó la huida de muchos de los que marcharon pacíficamente. Los encapuchados continuaron en los alrededores de la explanada principal de CU hasta poco después de las 5 de la tarde.
Pese a estos hechos no fue necesaria la intervención de la autoridad, aunque dos unidades del Metrobús fueron grafiteadas por los anarcos y retiradas del servicio para evitar daños más severos.
Posteriormente, en conferencia de prensa conjunta, los secretarios de Gobierno, Guillermo Orozco; de Seguridad Pública, Raymundo Collins; de Protección Civil, Fausto Lugo; así como el procurador capitalino, Edmundo Garrido, y el director del sistema Metrobús, Guillermo Calderón, informaron que en perímetro del campus universitario se desplegó una fuerza de 500 uniformados para evitar actos violentos contra la comunidad estudiantil y a la ciudadanía en general, y pese a los incidentes con los encapuchados, el resultado final de la movilización fue de saldo blanco.
SALVAN RIÑÓN A UNO DE LOS JÓVENES APUÑALADOS
El estudiante Joel Meza García, de 21 años, logró salvar el riñón derecho que porros le perforaron con arma punzocortante el pasado lunes, pero deberá esperar 48 horas de evolución para determinar la capacidad de funcionamiento de dicho órgano.
Gabriela García comentó que su sobrino ingresó ayer por la mañana al quirófano del Hospital de Especialidades del Centro Médico Siglo XXI y los cirujanos informaron horas después que el llamado “empaquetado”, las compresas que se colocaron inicialmente en la unidad médica número 8, lograron detener la hemorragia interna.
El estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, atacado cuando salía de clases junto con su novia, despertó a la sedación y solo reportó sentirse cansado, de acuerdo con sus familiares que se encuentran al pendiente en la unidad de cuidados intensivos de dicho hospital de alta especialidad.
Por estar en esa área, el estado de salud de Meza García se sigue considerando grave pero estable. No se ha dicho nada respecto a lo que se procederá con la mitad de su oreja derecha que fue mutilada y la cual también está siendo vigilada para evitar infecciones nosocomiales.
En la misma área se encuentra Emilio Alejandro Aguilar, de 19 años de edad, el otro estudiante agredido en la explanada de Rectoría de la UNAM, que sufrió varias lesiones y perforación con arma blanca en el glúteo derecho.
Margarita García, madre de Joel, exigió de nueva cuenta a la UNAM que se indague qué originó el ataque, se esclarezcan los hechos y se comprometan a cuidar la integridad de los estudiantes.
“Yo estaba confiada de que mi hijo iba a la facultad, regresaba a la casa, estaba en el tiempo en el que salía de clases. A la Facultad de Filosofía también le pido que proteja a los estudiantes, son nuestro tesoro, los que van a sacar adelante al país. No puede estar pasando esto”, expresó.
REFUERZAN SEGURIDAD
Tras los hechos violentos del lunes pasado y las movilizaciones de estudiantes, el gobierno de Ciudad de México desplegó a 200 elementos de la policía para reforzar la seguridad en las inmediaciones de Ciudad Universitaria y mantiene vigilancia en al menos otros 33 planteles de la UNAM, informó el Jefe de Gobierno, José Ramón Amieva.
En entrevista, el mandatario local señaló que ya se tiene identificadas algunas personas que participaron en el ataque contra los estudiantes, los vehículos que se trasladaron y se está verificando si tienen algún mandamiento judicial pendiente.
“Hemos desplegado de manera adicional en las inmediaciones de CU 200 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública; estamos reforzando, nosotros tenemos conocimiento de 33 espacios, preparatorias, CCH, facultades, centros de investigación, donde estamos atentos en los perímetros para atender y preservar la seguridad e integridad de los estudiantes, del profesorado y del personal”, dijo.
Sin embargo, Amieva dejó en claro que toda la información sobre los hechos del lunes se está entregando a la PGR porque los hechos ocurrieron al interior de Ciudad Universitaria, zona federal, y sobre todo porque hay dos jóvenes que resultaron con lesiones graves.
Amieva reiteró que hasta el momento se desconoce el punto de reunión del grupo de porros que fue transportado en un camión desde el Estado de México con rumbo a Ciudad Universitaria.
“Vemos un autobús que ingresó al segundo piso, es la principal situación, que no es permitido ingresar a este a los buses salvo excepciones contadas. Me imagino que no hicieron caso a estas barreras en el Estado de México y fue como ingresaron”, expresó el gobernante capitalino.
CLAVES
SIN DENUNCIAS EN GAM
La procuraduría capitalina no tiene denuncia alguna relacionada con actividades de porros en planteles de la UNAM que están en la zona norte de Ciudad de México, informó el fiscal en Gustavo A. Madero, Óscar Tonatiuh Vázquez Landeros.
Mencionó que en esa delegación hasta el momento solo se tiene registro de 12 denuncias por robo a transeúnte con violencia afuera o en inmediaciones del CCH Vallejo.