De manera muy mesurada y a diferencia de otras ocasiones, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón dijo ser respetuoso de los cambios de integrantes en las bancadas del Congreso local, situación que ha desatado críticas ciudadanas.
La postura del mandatario estatal se da en medio de la polémica por la sanción en su contra que está pendiente, tras ser acusado de desviar recursos en las recolección de firmas para su entonces campaña presidencial.
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Ante dicho panorama, Rodríguez Calderón decidió no dar muchas opiniones al asegurar que es respetuoso del Poder Legislativo, y pidió que los diputados también sean respetuosos de las labores del Ejecutivo.
“Yo he decidido no dar opiniones sobre eso porque es un poder aparte. No me gusta, no me agrada, pero pues es su decisión (cambiar de bancadas). De eso se trata, que haya libertad y el Ejecutivo no se meterá en más decisiones del Congreso, espero que los diputados también no se metan en las decisiones del Ejecutivo.
“La separación de poderes es lo que va a llevar a Nuevo León a tener mejores condiciones, no debiera ser, pero lo están haciendo”, refirió.
Sin embargo, el gobernador mencionó de manera muy escueta que “no es bueno” lo que los diputados están haciendo al interior del Congreso, y se mostró a la espera de que dichos cambios no afecten los proyectos del Estado.
“No es bueno (hacer los cambios de bancada)... Yo estoy concentrado en el trabajo del Gobierno, espero que eso no afecte en las propuestas que nosotros vamos a hacer al Congreso para que Nuevo León avance mejor, que tengamos una relación, que es lo que yo intento con el Congreso, quizás ahí internamente no estén bien las cosas, pero con nosotros en el Ejecutivo lo que yo pretendo es que tengan la sensibilidad independientemente del partido en el que estén o hayan militado”, expresó.