El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) construirá dos hospitales en los municipios de Puebla y Amozoc para sustituir el Hospital General Regional Número 36, mejor conocido como “San Alejandro”, el cual está siendo demolido al quedar inservible por los daños que su infraestructura sufrió durante el terremoto del 19 de septiembre de 2017.
Así lo reveló el gobernador Miguel Barbosa Huerta, quien ventiló que el viernes pasado recibió en Casa Aguayo al director general del IMSS, Zoé Robledo Aburto, quien le adelantó que el organismo federal sí contempla proyectos de obra en el estado para reemplazar a San Alejandro.
El mandatario mencionó que una de las clínicas estará ubicada en el mismo terreno de San Alejandro, pero ocupará la mitad que el complejo original llegó a disponer; la otra estará localizada en un terreno que ya fue donado por el ayuntamiento de Amozoc, previa aprobación del Congreso local.
“El día viernes de la semana pasada me reuní con Zoé Robledo, me anunció la sustitución del hospital San Alejandro por dos inmuebles, uno en la mitad del terreno donde se ubica actualmente y otro en Amozoc”.
Mencionó que “las cosas ya no funcionan como antes y ya no hay recursos etiquetados desde la Federación” para la reconstrucción de San Alejandro, tal y como denunció el diputado federal Mario Riestra Piña durante la presentación del Paquete Económico 2022; sin embargo, reiteró que el IMSS invertirá parte de sus recursos en la edificación de las dos clínicas que lo sustituirán.
Durante un recorrido que realizó MILENIO Puebla por el que fuera considerado el nosocomio más grande de Latinoamérica, se pudo constatar que ya fueron retirados los bastidores de acero estructural que soportaban los revestimientos Plaka de yeso desde el interior, así como los sistemas de fachada de revestimiento aislante desde el exterior.
También se quitó la escalera de emergencia ubicada a un costado de las dos torres del excentro médico, cuya capacidad de cobertura permitía recibir a derechohabientes de otras entidades, como Oaxaca, Veracruz, Guerrero, Chiapas y Tabasco, entre otros.
De igual forma, se pudo comprobar que fue retirada toda estructura metálica, como son puertas, ventanas y puertas corredizas, así como plafones falsos, tendidos eléctricos e hidráulicos, herrajes, pasos de gato, soportes y tomas de aires medicinales y el resto de los aditamentos.
Uno de los alarifes que se encontraba en espera de su turno para laborar informó que tan pronto queden “limpios” los soportes de carga, serán cortados para su retiro, acción que será realizada por herreros y paileros bajo la supervisión de un estructurista.
AFM