Entre miedo al contagio y recorridos en zonas inseguras, 34 brigadas del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) llevan a cabo el levantamiento de información para la Encuesta Nacional de Salud Pública Covid-19 que permitirá medir si los mexicanos ya desarrollamos alguna inmunidad a esa enfermedad, por medio de muestras de sangre, cuya toma ya concluyó en Ciudad de México, Estado de México y Puebla, por lo que continúa en el resto del país.
“Empezamos a inicios de agosto, ya cubrimos Ciudad de México, Estado de México, Puebla y ahorita inicié en Veracruz; somos 34 brigadas las que estamos trabajando simultáneamente en el país y todo estamos capacitados con las medidas de bioseguridad para proteger a la ciudadanía y a nosotros también”, dijo Socorro Jaimes, supervisora regional de la Ensanut Covid-19.
En entrevista con MILENIO, Jaimes relató que en el contexto de la pandemia, la población seleccionada para participar en este ejercicio se ha mostrado reticente debido al temor a contagiarse de covid-19, pero también a las desinformación propagada en redes sociales y grupos de WhatsApp en algunas localidades, por lo que para evitar percances como los ocurridos con encuestadores de empresas privadas que han sido linchados, reciben acompañamiento de las autoridades locales y viajan en vehículos bien identificados con logotipos del INSP y la Secretaría de Salud, además de portar sus respectivos uniformes y credenciales, con el respectivo uso de cubrebocas y guantes.
“Hay lugares donde tienen grupos de WhatsApp y se informan ahí todo, nos ha tocado situaciones donde dicen no los dejen venir, no los dejen entrar a casa y debemos buscar el acompañamiento de los municipios o del personal de salud para que vean que esta encuesta es real, que estamos certificados, que estamos entando a sus localidades o colonias con previa autorización (…) Puebla ha sido el más complicado hasta ahora, es donde se han presentado casos de linchamiento, y para evitarlo gestionamos desde nivel estatal a municipal para que todos vayamos seguros y la población también se sienta segura”, indicó.
Un total de 146 encuestadores debidamente protegidos visitarán 12 mil viviendas distribuidas en 9 regiones del país, de todos los estratos sociales. Tan solo en la Ciudad de México, buscaron entrevistas en mil 949 hogares, pero solo mil 163 accedieron. La supervisora indicó que en esta ciudad, fue la alcaldía Tláhuac donde mayores complicaciones de seguridad percibió su brigada, por lo que tuvieron acompañamiento de patrullas, así como de personal de un centro de salud de la zona.
“La muestra es aleatoria, entonces no puede tocar una zona bastante peligrosa y ahí si requerimos acompañamiento, y nos han acompañado patrullas de seguridad pública”.
Cada brigada visita en promedio 34 hogares que resultan seleccionados, a todos se les se les toma prueba para determinar antígenos para covid-19 y solo en algunos seleccionados, se realiza una segunda visita para las pruebas de detección de enfermedades crónicas como diabetes, las cuales se toman en ayuno.
“Entramos a los hogares y todo el equipo para la toma de muestra es estéril y desechable, se utiliza para una sola persona. Estás muestras se guardan en un tanque de nitrógeno (…) En los centros de salud de las localidades que visitamos nos proporcionan un espacio donde procesamos las muestras de sangre, con nuestro laboratorio portátil”.
Asimismo, destacó que procuran estar el tiempo necesario solamente en los hogares, con sus respectivos cubrebocas y dobleguante, además de que también entregan cubrebocas a los participantes de cada familia, que en promedio son tres personas por hogar.
Relató que un encuestador de la brigada hace la entrevista, después los enfermeros o laboratoristas entran a la casa y hacen la mediciones, procurando guardando la sana distancia.
“Al momento de entrar a los hogares “nos sanitizamos para que estén seguros que no los vamos a contagiar de nada, también tenemos familia y no queremos contagiarnos”, refirió.
bgpa