Al advertir que la violencia de género subsiste en México y en muchos países, la presidenta de la Cámara de Diputados, Laura Rojas, convocó a desmantelar el andamiaje histórico de exclusión, desigualdad y discriminación contra las mujeres.
Durante su participación a distancia en la Décima Tercera Cumbre de Presidentas de Parlamento, la legisladora panista sostuvo que las mujeres no pueden tolerar más la normalización de la violencia que ha escalado y se alimenta de indiferencia e impunidad debido a la permisividad, justificación y minimización por parte de muchos hombres y mujeres.
“Las múltiples violencias que sufrimos en todos los espacios, ya sean familiares, escolares, comunitarios, laborales o públicos, son una lacerante que debe afrontarse con determinación: el derecho que tenemos a vivir libres de violencia debe ser una realidad más que una aspiración”, puntualizó.
Rojas subrayó que en México y todo el mundo la pandemia de covid-19 ha provocado una grave crisis sanitaria, económica y social de proporciones nunca vistas y con devastadores efectos en la vida de millones de personas.
“Sin embargo, a la par de esta pandemia y debido a las medidas de aislamiento se ha exacerbado otra con consecuencias también dramáticas y sumamente dolorosas: la violencia contras las mujeres y las niñas”, acusó.
Ante lideresas parlamentarias de todo el mundo, la diputada presidenta celebró la representación paritaria entre mujeres y hombres en el Congreso mexicano tras varias décadas de lucha y reformas legales en la materia, pero advirtió que aún estamos lejos de erradicar la violencia de género.
Como ejemplo de ello recordó las agresiones verbales del legislador petista Gerardo Fernández Noroña contra la panista Adriana Dávila el año pasado, así como el reproche del senador emecista Samuel García hizo en redes sociales a su esposa por “enseñar la pierna”.
“El año pasado un diputado agredió verbalmente a una compañera diputada llamándola bocona y diciendo que se merecía una golpiza; a mí misma, un diputado me dijo que merecía ser sancionada por tomar una decisión en uso de mis facultades, y en días pasados se volvió viral un video en vivo en una red social, en el que un senador regañaba a su esposa por enseñar la rodilla y le decía que no se había casado con ella para que enseñara partes de su cuerpo”, expuso.
En su turno, la legisladora morenista Gabriela Cuevas, presidenta de la Unión Interparlamentaria, instó a las 46 mil parlamentarias de todo el mundo a revisar y eliminar toda norma que implique discriminación contra las mujeres.
“Cuando decimos que no vamos a dejar a nadie detrás, el no dejar a nadie detrás también se aplica a las mujeres y a las niñas, y en los parlamentos esto significa examinar nuestras constituciones, toda ley, toda norma, examinar toda legislación para asegurar que no haya discriminación contra nadie y, sobre todo, que no haya discriminación contra mujeres ni niñas”, remarcó.
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