“Gran parte de los mexicanos están enamorados de Andrés Manuel López Obrador, le permite todo tipo de excesos y violaciones a la ley”, asegura Gustavo Madero.
En entrevista, el senador panista dice que, con la revocación de mandato, el tabasqueño busca concretar una “perversidad democrática” al estar en la boleta electoral de 2021 para salvar a Morena y mantener la mayoría legislativa en la Cámara de Diputados.
Recuerda que el último presidente que estuvo en una boleta fue Porfirio Díaz, quien después de 30 años en el poder perdió precisamente contra su tío-abuelo, Francisco I. Madero.
En el contexto del 80 aniversario del PAN, el senador reconoce que el partido debe constituirse como una alternativa y no solo como oposición ante los embates de Morena y del Presidente.
También admite que actualmente Acción Nacional no goza de popularidad entre la gente debido a sus errores mientras fue gobierno, por lo que “requiere una nueva narrativa”.
¿Cómo califica el ánimo social sobre el mandato de AMLO?
Nuestro país necesita hacer una revisión histórica, ver qué es lo que quiere para el futuro y si el triunfo de Andrés Manuel fue por un voto de castigo y por enojo contra los gobiernos de PAN y PRI que no actuaron bien; ese dilema se resolverá en 2021.
La perversidad de Andrés Manuel consiste en que quiere meter la revocación de mandato para estar en la boleta en 2021. Sabe que puede perder la mayoría en la Cámara de Diputados porque a sus diputados no los conocen.
Quiere un refrendo revocatorio para secuestrar la elección, no será una votación por un presidente municipal, por un gobernador o por un diputado, será para saber si quieren a Andrés Manuel o no.
¿Qué está haciendo AN como contrapeso, ya le dijeron al Presidente que está mintiendo?
No, a la gente no le importa la verdad, solo la posverdad. No le importa los datos, solo las opiniones y los sentimientos. Por ejemplo, no hay cuestionamientos profundos a sus políticas públicas. El Plan Nacional de Desarrollo es una vacilada, pero por qué no hay una oposición que se subleve, porque tenemos atrofiados los reflejos sociales, estamos apejendejados; estamos en la etapa de un pueblo que está enamorado de su Presidente y le perdona todo.
Ese pueblo enamorado es el que se enojó con Peña por la corrupción y con Calderón por los muertos, ¿a Andrés Manuel le hace falta un peje que lo critique, parece que los partidos están escondidos?
Sí, están escondidos y se está juntando lo peor de los mundos, porque tengo a un pueblo enojado e ilusionado que le dio toda la confianza a AMLO. La oposición están diezmada en tamaño. Hoy, cuando hablamos de la oposición, la gente no nos cree porque dice que hablamos por la herida, que solo pensamos en que perdimos y queremos darle en la torre a Andrés Manuel.
El PAN tiene una gran responsabilidad en ese sentido y no está construyendo la alternativa para dejar de ser solo oposición.
¿El PAN se está tardando en construir esa narrativa?
Sí, pero no es un problema solo del PAN, sino de todos. Es muy fácil decir: “Oye, los güeyes del PAN la están regando”. Estoy tratando de ver más allá, porque este tema nos supera, vamos a tener que unirnos todos para construir una postura de mayoría y que los partidos no sean los que nos definan. Se trata de que coincidamos en la visión de futuro.