El gobierno de México rechazó la propuesta de Estados Unidos para que inspectores o supervisores de ese país se trasladen a territorio mexicano con el objetivo de constatar si las empresas nacionales cumplen con los compromisos laborales adquiridos en el T-MEC, y descartó al mismo tiempo que vaya a haber “sorpresas” en el acuerdo comercial.
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En su conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que, en lugar de la visita de los funcionarios de EU, se propuso la implementación de paneles, en los que participen un representante estadunidense, uno mexicano y un tercero, para que en caso de que llegara a haber controversias determinen si hay incumplimientos o violaciones a la ley por parte de alguna empresa o sindicato.
“Nosotros no aceptamos eso, que haya una especie de inspectores para ver si una empresa cumple con lo establecido por la ley, si realmente se llevó a cabo la elección sindical de una manera democrática. Lo que se propuso es que haya paneles para que, si no se cumplió con la norma en un plazo considerable, determine si hubo incumplimiento en materia laboral”, detalló.
Señaló que los trabajadores ven la propuesta como una garantía para que realmente se cumpla lo que está en la ley, pues “incluso los demócratas nos han llegado a decir que no es por nosotros, que nos tienen confianza, sino que es un Tratado que va a quedar establecido y no saben qué va a pasar después”.
Mientras que los empresarios “argumentan que esto puede ahuyentar la inversión porque tiene el propósito de que no haya la confianza suficiente para la instalación y el establecimiento de las empresas, sí existen estos mecanismos de verificación”.
Dijo que es urgente aprobar el T-MEC por los efectos que tiene el proceso electoral que se celebrarán el próximo año en Estados Unidos, aunque reconoció que es un tema complejo.
En ese sentido, afirmó que el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) Jesús Seade, tiene toda su confianza, sin embargo, dejó en claro que antes de tomar la decisión de firmar o de aceptar cualquier modificación, se deberá consultar al Senado de la República.
“NO NOS ASUSTA”
Al comparecer ante el pleno del Senado en el contexto de la glosa al primer Informe de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, el canciller Marcelo Ebrard afirmó que México “no se asusta” frente a Estados Unidos y celebró que el Senado mexicano haya ratificado ya el T-MEC, porque así el país vecino no puede pedir que se renegocie todo, por lo que cualquier adición tendrá que ser otro documento discutido y puesto a consideración de la Cámara alta.
El titular de Relaciones Exteriores afirmó que no hay sorpresas en las nuevas demandas que hace Washington, porque en el tema laboral se ha dejado claro que la legislación mexicana es más avanzada que la de EU, mientras que el presupuesto aprobado para el próximo año destina más recursos de lo previsto para ese rubro.
Respecto a las presiones que acusan empresarios para modificar el T-MEC, Ebrard aseguró que habrá una diplomacia de unidad con el Senado para enfrentar esta demanda estadunidense de revisar los temas laboral, de medio ambiente y tecnología.
Aunque la priista Beatriz Paredes pudo en duda que el Senado haya hecho bien en adelantarse a la ratificación de los congresos de EU y Canadá, Ebrard defendió la decisión al argumentar que fue oportuno anticiparse.
“Porque ahorita querrían renegociar todo el tratado y afortunadamente eso no va a ocurrir, porque ya les dijimos que el texto fue ratificado por el Senado y cualquier cosa adicional tendrá que ser otra discusión, otro documento, un adéndum, como se le quiera llamar, que tendrá que ser discutido y aprobado, en su caso por nuestro Senado”.
Garantizó que México no aceptará ningún cambio al T-MEC sin que lo conozca esta cámara, porque esa fórmula ya funcionó cuando la discusión de la aplicación de aranceles.
“NO SOY VICEPRESIDENTE”
Ebrard defendió la intervención de la cancillería en asuntos de política interior, al negar que actúe como vicepresidente del país porque en México no existe esa figura, no aspira a nada más que cumplir con su trabajo y porque “tenemos mucho Presidente y no necesitamos vicepresidentes”.
La panista Alejandra Reynoso criticó que haya asumido las funciones del Ejecutivo de salir a todas las reuniones internacionales, lo que ha llevado a señalar que es un vicepresidente del país.
“Usted me dice que cuál va a ser la política de México, que si tengo funciones de vicepresidente. No, en México no hay vicepresidentes, soy secretario de Relaciones Exteriores, ahí están las facultades establecidas en la ley, no aspiro a nada más que cumplir con mi trabajo”, respondió Ebrard.
Y ADEMÁS
“PLANTEAR CAMBIOS, NORMAL: WAYNE”
El ex embajador de EU en México Anthony Wayne reconoció que plantear nuevos elementos a un acuerdo que ya estaba cerrado no es la mejor práctica, aunque aseguró que es una práctica normal cuando se realizan este tipo de negociaciones.
En entrevista, el diplomático en retiro estimó que los detalles de los elementos que se buscan incluir en el T-MEC no están totalmente claros, por lo que resulta fundamental que exista un diálogo para aprovechar la ventana de oportunidad que se abre para lograr que se ratifique antes de que concluya el año.