Consulta de revocación de AMLO, un acto valiente y democrático: Miguel Ángel Revilla

El presidente de Cantabria, España, dijo estar dispuesto a mediar en las relaciones México y España.

Miguel Ángel Revilla (Foto: Jesús Hellín)
Miguel Ángel Revilla. (Foto: Nacho Romero)
José Antonio López
Cantabria, España /

El presidente de Cantabria, España, Miguel Ángel Revilla, elogió la actitud “valiente” y “democrática” del presidente Andrés Manuel López Obrador por haber realizado la consulta de revocación de mandato; además, calificó de “positivo” el trabajo del mandatario mexicano porque para nadie ha sido fácil “gobernar en el peor momento,” que se recuerda después de la Segunda Guerra Mundial debido a la pandemia de covid y ahora la guerra en Ucrania.

Revilla, uno de los políticos españoles más carismáticos y que siempre llama las cosas por su nombre, atendió a Milenio, pese a lo apretada de su agenda, antes de entrar a votar en el pleno del Parlamento cántabro, y reiteró, entre otros temas, que está dispuesto a mediar en las relaciones México y España. Un asunto que, afirmó, “se arregla en dos horas”.

¿Qué opina del resultado en la consulta de revocación de mandato?

Valoró de positivo la intencionalidad del presidente de México. No es normal que en un mandato de seis años, el presidente diga que el pueblo opine si se tiene que ir o tiene que continuar. Me parece que es una innovación curiosa, por mi parte valorada de manera positiva, porque para revocar a un presidente normalmente tienen que hacerlo los parlamentarios, o en una moción de censura. Me parece un gesto valiente y muy democrático, más allá de que haya votado el 20%, tengo entendido.

¿Considera que era necesaria?

No sé si era necesaria, pero yo recuerdo que él lo dijo en la campaña electoral y las promesas que hace un político se deben de cumplir, que no siempre es así, y por lo que veo el resultado ha sido abrumador por parte de los que fueron a votar (…) Yo creo que la figura del presidente de México en estos momentos está muy consolidada. Mi impresión es que la mayoría del pueblo mexicano está con él, porque está al menos intentando cambiar un poco el país en la idea (sic) de que siga siendo un país de corrupción y de tanta desigualdad social. Andrés Manuel está haciendo esfuerzos que se le valoran positivamente.

¿Le parece que en estos años de gobierno López Obrador lo está haciendo bien?

Dentro de las circunstancias sí, claro. Nos ha tocado a los que estamos ahora gobernando el peor momento que se recuerda después de la Segunda Guerra Mundial. Hemos visto una situación de gente confinada, empresas cerradas, mucho dolor por la cantidad de muertos, ha habido que dedicar recursos extraordinarios al tema de la sanidad para preservar la vida de las personas. Todo esto ha obligado a cambiar planes de inversión en otras cuestiones y ahora, por si fuera poco, se produce esta guerra en Ucrania que está poniendo la energía en algunos países a precios insostenibles. Todo esto son momentos de muchísima dificultad y yo creo que López Obrador está afrontando todo de manera muy adecuada.

¿Cómo ve México desde España?


Es un país que adoro. No he ido nunca ni a Francia, Alemania, Holanda, ni a Portugal, etcétera. Mis seis viajes han sido siempre a México. Yo en México estoy en casa, ya no es solamente que me considere casi mexicano por las costumbres, la comida, la manera de ser. (Cuando viajo) No tengo la impresión de haber dado un salto de diez mil kilómetros, o los que sean, no tengo esa sensación porque me siento como en casa.


Luego hay otra cosa que creo que no a todo el mundo le viene bien: la altura de México, a mi me viene de manera extraordinaria para mi salud, es como si me hubieran quitado unos años de encima. Adoro México. Soy muy mexicano y estoy deseando volver. La última vez que estuve allí fue en la toma de posesión de López Obrador, en cualquier ocasión que pudiera si me dan a escoger me pido México.

Entonces, ¿le duelen las pequeñas fricciones que ocurrieron entre ambos países?

López Obrador ha hecho una rueda de prensa en donde habla de mí, me viene a proponer como un hombre de mediación. Ya lo dejé claro en un programa de televisión, en La Sexta Noche: yo por España y por México haría lo que sea, naturalmente sin retribución económica. Eso sí, me tendrían que pagar un billete (boleto) en clase turista para ir allí. Yo encantado de aportar. Creo que es un tema de matices y lo que no puede ser es que con el país más importante para España y para la lengua española, que es México, y que es también el futuro de nuestra lengua, no tengamos unas muy buenas relaciones. Si hemos sido capaces los españoles de llegar a un acuerdo teniendo que ceder todo un mensaje de 40 años, para llegar a un acuerdo de convivencia con Marruecos, eso con México se hace exactamente en dos horas.

¿Esto tendría que pedírselo en persona el presidente Pedro Sánchez o el ministro de Exteriores, José Manuel Albares?

Vamos a ver, con relación a esto, a mí me ha llamado el presidente del Gobierno y el líder de la oposición (Alberto Núñez Feijóo, Partido Popular). Yo estoy disponible para intentar que mis dos países, el de nacimiento y el de admiración…si yo pudiera hacer algo, encantando de la vida, a cambio de nada. No quiero cargos ni ningún tema ostentoso, ni nada, lo que quiero es hacer algo y yo digo que sería cuestión de poco tiempo, siempre que cada uno nos bajemos un poco del pedestal, que España pierda un poco de ese orgullo que a veces nos ha llevado por mal camino, y que admitamos que ahora España y México es otra cosa, que hay que respetar la soberanía de los países y a sus gobernantes, y que nosotros hablemos para nuestra gente. AMLO habla para México y aquí hablamos para España.


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