La fracción del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en la Cámara de Diputados se declaró abiertamente contra la iniciativa de reforma eléctrica y la bancada del PES se abstuvo de participar en el parlamento abierto para discutir la propuesta, mientras sus aliados de la llamada cuarta transformación, Morena y PT, reafirmaron su respaldo “absoluto y contundente” al proyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante la inauguración del parlamento abierto, el coordinador del PVEM, Arturo Escobar, estableció la posición de su partido contra la iniciativa presidencial, al calificar de “inadmisible” que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) compita por encima de las energías limpias.
“Por supuesto que como el partido político principalísimo en la promoción de energías renovables y energías limpias tenemos una postura diferente a la iniciativa presentada”, puntualizó.
El líder parlamentario de Morena, Ignacio Mier, y su correligionaria Dolores Padierna reconocieron a su vez la iniciativa de reforma eléctrica de López Obrador como propia y se declararon listos para defenderla con todos los datos financieros, técnicos, políticos y jurídicos a su alcance.
Por el PT, el diputado Gerardo Fernández Noroña, expresó su respeto a la discrepancia del PVEM, al tiempo de reafirmar el respaldo incondicional de su bancada a la propuesta presidencial.
“A nombre de esta fracción, digo con absoluta claridad que el Partido del Trabajo respaldará de manera absoluta y contundente la iniciativa preferente del compañero presidente López Obrador. Lo digo sin ambages, lo digo sin eufemismos”, remarcó,
En su turno, la presidenta de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri, advirtió que el parlamento abierto tiene la responsabilidad histórica de discutir a profundidad la iniciativa preferente enviada por el Ejecutivo.
“Este parlamento tiene la histórica responsabilidad de discutir a profundidad la iniciativa preferente que recibió al inicio del periodo ordinario; el tema levanta pasiones y resuena más allá de las fronteras, la votación consecuente tendrá impacto en la posibilidad del país de cumplir con el Acuerdo de París en reducción de emisiones contaminantes, así como honrar los tratados comerciales como el TPP y el T-MEC”, dijo.
A contrapelo del presidente Andrés Manuel López Obrador, el coordinador del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, llamó a “cambiarle muchas comas, ponerle puntos y seguido, puntos y aparte y mejores contenidos” a la iniciativa.
“No queremos una reforma que atente contra la economía de las familias mexicanas, que pueda vulnerar la certeza jurídica y crecimiento económico y el bien común. Estamos por supuesto a favor de la legalidad, la transparencia la rendición de cuentas y no argumentos ideológicos que nos dejen en el museo arqueología del siglo pasado”, señaló.
Por el PRI, el diputado Enrique Ochoa sostuvo que la fortaleza de CFE se ha logrado precisamente abriendo las puertas a energías limpias, innovación tecnológica e inversión privada, bajo los modelos permitidos por la Constitución, sustituyendo el uso del combustóleo y del diésel.
“La iniciativa preferente contiene elementos que van en contra y van en la ruta opuesta y contraria a la que avanza el mundo”, advirtió el también ex director de la CFE.
Por separado, la lideresa parlamentaria del PRD, Verónica Juárez, advirtió que la iniciativa del presidente López Obrador anticipa una escalada de litigios legales, tanto en tribunales internacionales entre el Ejecutivo Federal y las empresas extranjeras, como confrontaciones con sus gobiernos, cuyas consecuencias económicas son imprevisibles.
JLMR