El Estado tiene la obligación de atender la situación de orfandad de niñas, niños y adolescentes, así lo establece la reforma que la Cámara de Diputados avaló, con el voto unánime de la asamblea, a la Ley General de Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes.
La diputada Eunice Monzón García, proponente de una de las iniciativas que hizo posible el cambio legal, explicó que, además de reconocer los derechos de la niñez en desamparo familiar, establece que los procedimientos de adopción sean expeditos y simples.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reconoce a un millón 600 mil niñas, niños y adolescentes que viven sin sus padres, muchos de ellos, son víctimas colaterales de los feminicidios, la violencia ocasionada por el crimen organizado o las desapariciones forzadas, o bien, afectados por la pandemia de covid-19 y en muchos casos no son visibilizados.
"Este nuevo marco normativo que modifica los artículos 10, 28 y 49 de la ley en cuestión, señala que las niñas, niños y adolescentes que sean víctimas directas o indirectas y queden en situación de desamparo familiar tendrán garantizada la prestación de servicios de atención, al menos los reconocidos en ley, que les permita una óptima inclusión al entorno social, además, mandata que los trámites de adopción se agilicen y simplifiquen” explicó Monzón García.
LG