Ante el Proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) y los Criterios Generales de Política Económica para 2024, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp) prevé un deterioro fiscal para el próximo año.
Destacó en un reporte que lo propuesto por el ejecutivo no cumple adecuadamente con el propósito de asegurar la estabilidad económica durante la transición política del año próximo, frente a la existencia de riesgos significativos
Afirman que no hay registro de nuevos impuestos, ni mayores tasas impositivas, mientras que los ingresos públicos bajan como proporción del Producto Interno Bruto y el gasto sube en los programas favoritos del gobierno.
“El gasto sigue creciendo fuertemente a pesar de la debilidad de las fuentes de ingresos. Para el año próximo se estima en 9 billones de pesos, 26.2 por ciento del PIB”, comentó el Centro de Estudios.
Resaltó que para el próximo año se planea aún menor disciplina, tal como solía ser hace décadas en los últimos años de los sexenios.
- Te recomendamos Consumo no muestra tendencia favorable pese al optimismo en la economía: Ceesp Negocios
Explicó que la deuda pública en 2024 acabará siendo 59 por ciento mayor que en 2018 y con la expansión de la deuda y el aumento de las tasas de interés, llevó a que el costo financiero de la misma alcance 3.7 por ciento del PIB, su mayor porcentaje desde 1991.
“En términos absolutos, esto implica 1.3 billones de pesos, equivalente a más de tres cuartas partes de la nómina del sector público”, comentó el CEESP.
Señaló que en la misma línea, el presupuesto implica que el resultado primario de las finanzas públicas será deficitario en 1.2 por ciento del PIB.
“Ello significa que el gobierno tendrá que recurrir a mayor deuda en 2024 para completar el pago de los intereses, lo que es claramente una prueba de insostenibilidad financiera” destacó.
Finalizó opinando que, dada la fragilidad y los consecuentes riesgos de las finanzas públicas, el presupuesto de 2024 debió ser prudente.