Fue en Marquelia, Guerrero, donde un grupo de jóvenes armados, con uniforme verde olivo, esposas y carrilleras, pertenecientes a la Policía Comunitaria UPOEG de Guerrero, suspendieron el ‘boteo’ sobre la carretera Acapulco-Pinotepa Nacional para dejar pasar al presidente Andrés Manuel López Obrador.
El titular del Ejecutivo federal se desplazaba junto con su equipo en tres camionetas tipo Suburban, provenientes del municipio de Florencio Villareal, en la Costa Chica de Guerrero, con dirección a Pinotepa Nacional, en Oaxaca.
El boteo, de acuerdo con uno de los jóvenes, quien rechazó dar su nombre, sería para pagar el sueldo de al menos 800 policías comunitarios que custodian la región, pues asegura que nadie les paga por su labor.
“Aquí no tenemos ningún problema, para eso tienen el cuete- así es”, dijo a MILENIO el joven policía.
Cuando pasó el Presidente por el retén, un grupo de pobladores se acercó a saludarle, a lo que el Ejecutivo exclamó: “Viva Marquelia”.
ledz