Un grupo de personas de los pueblos indígenas del norte de Jalisco se manifestó en el evento del presidente Andrés Manuel López Obrador para exhibir la falta de atención del gobernador Enrique Alfaro y rechazar la imposición de programas sociales que no van de acuerdo a sus costumbres.
Al menos 50 personas conformaron la manifestación que bloqueó el camino por el que llegaban las autoridades, pero tras exponer sus demandas se les permitió el paso.
A su llegada, integrantes del equipo de los llamados servidores de la nación se negaban a permitirles el acceso y ponían como condición dejar las pancartas, hasta que otros habitantes de la zona comenzaron a exigir respeto para sus compañeros, y las autoridades tradicionales pidieron que los dejaran pasar.
[Foto: Jesús Quintanar]
Los inconformes portaban pancartas con frases como "No imposición a programas sociales", "Programas contextualizados a la región", "Respeto a la práctica de usos y costumbres", "Cancelación total a empresas mineras en Wirikuta" y "AMLO, apóyanos en esta lucha".
Mientras que en otras pancartas rechazaban directamente la gestión del gobernador: "Enrique Alfaro, cumple con tu deber o renuncia", "Alfaro, exigimos respeto", "Exigimos que el gobierno estatal y municipal nos atienda".
En su discurso, la representante de los pueblos indígenas de Mezquitic, Jalisco, exhibió que durante mucho tiempo han pedido diálogo con el gobernador, pero nunca los ha atendido.
Enrique Alfaro, quien permaneció todo el evento con los brazos cruzados, dijo que no rehuía de los señalamientos y cuando tomó la palabra habló del compromiso de su gobierno y los apoyos que ofrece; sin embargo, los manifestantes comenzaron a gritarle "mentiroso", rechazo al que se sumaron otros asistentes.
[Jesús Quintanar]
Después, comenzó a alzar la voz para que se escuchara su mensaje y defendió que si en esta zona no se han hecho proyectos es porque "sus autoridades se negaron a recibir un solo peso y ese recurso ahora lo estamos invirtiendo en otra zona", lo que también negaron los asistentes a quienes el gobernador les advirtió que no caerá en chantajes.
"Voy a visitar la zona, pero advierto que no aceptamos chantajes ni cierres de escuelas, no pueden bloquear el derecho de los niños a estudiar, no vamos aceptar amagues, vamos a cumplir nuestra palabra, pero no con faltas de respeto", acusó al tiempo que los pueblos originarios no paraban de gritarle mentiroso y racista.
Insistió en que no busca rehuir de los señalamientos y mantuvo la defensa de las acciones de su gobierno, mientras sus seguidores comenzaron a lanzarle porras para contrarrestar los gritos de quienes protestaban.
El presidente Andrés Manuel López Obrador les pidió escuchar al gobernador y ofreció que el titular el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino, sea mediador. Y con votación a mano alzada, para apostar por la unidad y no por los pleitos, cerró el tema.
[Foto: Jesús Quintanar]
"Lo mismo les digo a los compañeros, que si les ofrece el gobernador que va a visitarlos, que acepten, que escuchen y que Adelfo ayude como intermediario, todos queremos la unidad y la justicia. ¿O no queremos la unidad? A ver, a ver, que levanten la mano los que quieran seguir peleando y los que quieran unidad y justicia, ¡eso es todo!", afirmó.
Al término del evento se le preguntó a López Obrador sobre las protestas contra el gobernador, pero consideró que son normales porque "son parte de la democracia, si fuera una dictadura no habría protestas".
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