La muerte de le magistrade Jesús Ociel Baena trascendió ya no sólo por la relevancia de éste para la defensa de los derechos humanos, también por las inconsistencias con las que la Fiscalía General del Estado (FGE) de Aguascalientes ha llevado el caso.
Activistas y miembros de la comunidad LGBTIQ+ han criticado a la institución titulada por Jesús Figueroa Ortega de adelantar conclusiones, descartar— casi de inmediato— una presunción de crimen de odio y llevar a cabo el proceso sin perspectiva de diversidad sexual.
Entre los clamores de justicia, se ha exigido a la Fiscalía General de la República (FGR) atraer el caso de le magistrade, además de comenzar a nombrarlo como un presunto magnicidio por odio: “En este asesinato no sólo se atenta su vida y sus derechos (de Jesús Ociel), indirectamente se está afectando a la esfera de derechos de las personas de diversidad sexual”, comentó Andrés Treviño, Director de Diversidad Sexual en Jalisco, en conversación con MILENIO.
Cuestionado por el actuar de la FGR, el propio gobierno federal hizo un exhorto a las autoridades del estado hidrocálido a no descartar ninguna línea de investigación por la muerte de Jesús Ociel. A ello, se mostró dispuesto a trabajar en conjunto con el gobierno de Aguascalientes para el esclarecimiento de los hechos.
De ser así, el caso de la muerte de le magistrade y su pareja quedaría en manos de la FGR. Sumándose a otros casos que también conmocionaron a la ciudadanía y, de cierto modo, hicieron cuestionar las capacidades de las fiscalías estatales.
El caso Debanhi
La desaparición y muerte de Debanhi Escobar conmocionó a un Nuevo León dolido por la ola de desapariciones de mujeres que se habían reportado entre marzo y abril; siendo una de ellas la de la joven de 18 años.
Sin embargo, la imagen de Debanhi— aquella mujer que aguardaba sola en la carretera mientras su falda marrón ondeaba con el viento — dejó en evidencia a una Fiscalía de Nuevo León rebasada y protagonista de un proceso cuestionable y abundante en irregularidades.
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Y es que días después de reportarse como desaparecida, el cuerpo de Debanhi fue encontrado dentro de la cisterna del motel Nueva Castilla, en Escobedo; un lugar que autoridades dijeron haber recorrido hasta cuatro veces antes del hallazgo. Ello emprendió la lucha de Mario y Griselda por dar con la verdad y la justicia para su hija.
En ese esfuerzo fue que en septiembre la FGR atrajo el caso de la joven estudiante el cual, al día de hoy (más de un año después) continúa abierto. Recién el 14 de noviembre, la madre y padre de Debanhi entregaron nuevas pruebas a la intuición.
Éstas reforzaron la hipótesis de que la joven perdió la vida por asfixia y no por ahogamiento, como habían concluído las autoridades. Pese al paso del tiempo, Mario Escobar reconoció confiar en la FGR para hacer justicia por el presunto feminicidio de su hija, registrado en abril del 2022.
Ariadna Fernanda: la pugna entre Fiscalías.
El hallazgo del cuerpo de la joven Ariadna Fernanda en la carretera La Pera-Cuautla desató un confrontación entre las Fiscalías de la Ciudad de México (CdMx) y la de Morelos. Cada una con una versión diferente del crimen.
Y es que mientras Morelos señaló que Ariadna había fallecido por una broncoaspiración, la Fiscalía capitalina contradijo la versión y aseguró que el cuerpo presentaba diversas lesiones por golpes. A ello, se realizó una nueva necropsia que determinó que la muerte de la joven fue por trauma múltiple.
A partir de ahí fue que la entonces Jefa de Gobierno,Claudia Sheinbaum, acusó a Uriel Carmona de encubrir el feminicidio de Ariadna Fernanda; derivando en su detención por su probable participación en delitos cometidos contra la procuración y administración de justicia.
Pero antes de la aprehensión de Carmona, la FGR atrajo toda la investigación del feminicidio; implicando las diligencias para determinar si la Fiscalía de Morelos habría actuado con dolo.
Las acusaciones contra el morelense derivan de su supuesto vínculo o nexo con Reutel “N”, el principal sospechoso en el caso de Ariadna Fernanda y a quien se le observó cargando a la joven inconsciente, para después colocarla en la camioneta con la cual habría viajado a Morelos para abandonar el cuerpo.
El sujeto y su novia, Fernanda “N”, permanecen en prisión preventiva dentro de la CdMx. La fémina fue identificada como coautora material por estar presente en el departamento donde Ariadna perdió la vida, en Ecatepec, Estado de México (Edomex).
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José Eduardo Ravelo y su presunta tortura
En 2021, el joven veracruzano José Eduardo Ravelo murió tras ser detenido en Mérida Yucatán. Sus padres sostuvieron que la brutalidad policial de la que fue víctima, y el abuso sexual, fueron elementos para terminar con su vida.
Y aunque su caso fue atraído por la FGR, la institución determinó que el joven falleció de neumonía no vinculada a alguna supuesta agresión de las autoridades. Además de negar la existencia de tortura y violación sexual.
No obstante, la institución detectó dictámenes ministeriales falsos y se ejerció atracción sobre las conductas que presuntamente cometió personal de la Fiscalía de Yucatán, la cual también habría presionado a testigos para culpar a policías ministeriales.
La Fiscalía de la República tiene la facultad de atraer casos del fuero común (aquellos correspondientes a los estados) toda vez que se demuestra la inactividad o ineficacia de la Fiscalía del Estado competente.
Cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) indicaron que la institución hoy encabezada por Alejandro Gertz Manero es la cuarta con más nivel de percepción de confianza, a diferencia de las estatales que se colocaron en el octavo lugar con 55.9%
ASG