Una situación poco usual ocurría ayer por la mañana en algunas avenidas de la zona metropolitana de Monterrey: varias gasolineras estaban cerradas por falta de combustible.
Algunos ejemplos se dieron por la avenida Sendero, en San Nicolás de los Garza y Apodaca.
Sin embargo, en gasolineras de esa zona que sí brindaron el servicio, las largas filas aparecieron, y debido a la alta demanda, el precio del litro rebasó los 25 pesos.
Y es que por segunda vez en el año, algunas gasolineras ubicadas en el área metropolitana de Monterrey reportaron desabasto de gasolina regular y premium, debido a una sobredemanda del producto de Pemex y problemas en la logística de entrega de Pemex, a decir de Mauricio González Puente, directivo de Onexpo, que es la unión de asociaciones de empresarios de la industria de hidrocarburos líquidos más grande del país.
González Puente explicó que se conjugaron varios factores para este fenómeno: sobredemanda, problemas en la logística y el hecho que el gobierno federal esté otorgando un subsidio extra y no esté cobrando el IEPS.
Ante esta situación, indicó, los particulares dejaron de importar gasolina y lo adquieren de la refinería de Pemex en Cadereyta.
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Sin embargo, explicó, hay una demanda extraordinaria y Pemex no se da abasto para surtir a todos al mismo tiempo, porque todas las estaciones de servicio quieren estar llenas de combustible y cuando se llega a acabar en alguna gasolinera se genera “cierto pánico”.
“Es un problema de sobredemanda y algunos que quieren acaparar el producto”, enfatizó.
“El gasolinero quiere almacenar combustible, el transportista (de pipas) también, el constructor o las minas (aunque son pocas en Nuevo León, las de Coahuila) se suministran de Cadereyta, así que todos quieren tener combustible al mismo tiempo”.
En Nuevo León existen 700 estaciones de servicio, y solo cinco por ciento presenta esta situación de falta de combustible, así que no se puede generalizar, subrayó.
“Se genera pánico y se empiezan a formar largas filas en las estaciones, porque el automovilista quiere llenar el tanque para no quedarse sin gasolina”.
González Puente comentó que se puede regularizar esta situación en unas semanas, aunque reconoció que se puede estar presentando esta misma condición en los siguientes meses.
Fuentes consultadas señalaron que los importadores privados como Exxon, Tesoro, Valero, entre otros, están perdiendo mucho dinero porque el precio del combustible en México está por debajo de su costo de producción en dólares; están reduciendo las importaciones a niveles bajos para reducir la pérdida.
Los privados prefieren colocar su producto en Estados Unidos, Europa o Asia, donde lo venden más caro. Aunado a lo anterior, el huachicoleo fiscal también les está pegando fuerte a los privados.