El pleno del Senado aprobó un punto de acuerdo, de urgente y obvia resolución, para que la Secretaría de Economía defienda al acero mexicano de posibles aranceles que podría imponer Estados Unidos.
Esto, tras una solicitud de 13 senadores de Estados Unidos que le plantearon a Gina Raimondo, secretaria de Comercio, y a Katherine Tai, representante de Comercial de ese país, respecto a iniciar consultas bajo la norma 232 en Acero y Aluminio contra el acero mexicano por exceder sus volúmenes históricos comerciales.
El presidente de la Junta de Coordinación Política, promotor del punto de acuerdo, Ricardo Monreal, advirtió que, en caso de ser atendida esta solicitud, se tendrían resultados catastróficos para el desempeño de la industria nacional.
Recordó que Estados Unidos es el principal socio comercial de los productos siderúrgicos mexicanos, por lo que bajo el supuesto de imponerse alguna medida, se afectaría la sustentabilidad de las cadenas productivas, así como la producción, el empleo e inversión en México.
Monreal consideró necesario que la Secretaría de Economía tiene que defender a la industria siderúrgica nacional.
Exhortó a esta dependencia a analizar los flujos de comercio siderúrgico de los últimos diez años con Estados Unidos y así determinar el balance del intercambio comercial, el superávit acumulado y los beneficios generados para cada país.
También, pidió a Raquel Buenrostro, titular de esta secretaría, identificar los productos siderúrgicos que concentran las exportaciones de esa nación a México y cuál es la capacidad de producción de estos insumos en el país.
El objetivo es identificar en cuáles de ellos le conviene a México considerar la aplicación de medidas de retaliación, en caso de que Estados Unidos decida imponer aranceles u otras medidas proteccionistas injustificadas a los productos de acero mexicano.
De igual forma, pidió al gobierno de Estados Unidos eliminar, para el caso de México, la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de 1962, ya que su aplicación resultaría contraria a los acuerdos alcanzados y consagrados en el T- MEC.
Ricardo Monreal subrayó que México no cuenta con una medida arancelaria similar, por lo que se estaría en condiciones comerciales de desigualdad.
Recordó que el 14 de febrero, 13 senadores estadunidenses dirigieron una carta a Gina Raimondo y Katherine Tai , en la cual sostienen que las importaciones de acero mexicano exceden los volúmenes históricos comerciales, en términos de la Declaración Conjunta sobre la Sección 232 de Contribuciones en Acero y Aluminio, firmada por ambos países en 2019.
Precisó que bajo este argumento, solicitaron a sus oficiales comerciales el inicio de consultas en términos del acuerdo comercial, para atender lo que consideran un aumento en la importación de acero mexicano y se regrese a lo que consideran “volúmenes históricos comerciales”, con la amenaza, incluso, de imponer cuotas y aranceles.
Expuso que, en respuesta a estas acciones, México podría aplicar aranceles que impactarían en las importaciones estadunidenses y repercutirían de forma negativa en las cadenas regionales de valor, incluso, acciones que actuarían en detrimento de los acuerdos alcanzados en la “X Cumbre de Líderes de América del Norte” de enero pasado.
Recordó que el T-MEC tiene como objetivo central promover la integración y el comercio entre los países socios, e impulsar el comercio y el sano desarrollo económico, lo que implica no imponer medidas proteccionistas injustificadas que van en contra del espíritu de cualquier acuerdo comercial.
JLMR