El Fondo Nacional del Fomento al Turismo (Fonatur), junto a la Oficina en México de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), suscribieron un convenio de colaboración para el Proyecto Integral de Desarrollo del Tren Maya, que incluye seis sitios declarados patrimonio mundial, además de otros cinco considerados valor universal excepcional.
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El director general de Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, destacó que la zona donde se llevará a cabo el proyecto “tiene una importancia estratégica”, por lo que calificó de fundamental el acompañamiento de la ONU durante la implementación del Tren Maya y añadió que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) ha jugado un rol fundamental durante el proceso.
Por su parte, el representante en México de la Unesco, Frédéric Vachero, dijo que su oficina “impulsará la integración de las comunidades mayas dispersas en Tabasco, Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo a través de proyectos y estrategias de educación, cultura y comunicación, apoyados en información científica y que se decidan con base en procesos participativos”.
A su vez, la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE, Martha Delgado, dijo que este proyecto pretende “cerrar las brechas de desigualdad que se habían mantenido en el sureste del país”, así como generar un modelo de trabajo basado en la conservación del patrimonio mundial.
Tras recordar la antigua y sólida relación que existe entre México y la Unesco, Delgado resaltó que este convenio es un instrumento importante para cumplir con la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible.
El acuerdo de cooperación fue firmado por el representante en México de la Unesco, Frédéric Vacheron, y el director general del Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, en presencia de la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE, Martha Delgado, quien participó como testigo de honor.
La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos también reconoció que la decisión del gobierno federal para “respetar, proteger y garantizar los derechos de los pueblos indígenas”.